Ciudad del Vaticano (Miércoles, 24-08-2016, Gaudium Press) La Audiencia General del día miércoles 24 de agosto del Papa Francisco fue transformada en un encuentro de oración por las víctimas del terremoto en Nursia, Italia, registrado en la madrugada de ese mismo día. El Pontífice decidió suspender la catequesis habitual para presidir el rezo de los misterios dolorosos del Santo Rosario.
Las actividades de rescate se desarrollan en medio de una considerable destrucción. Foto: Conferencia Episcopal Italiana. |
El Papa expresó sus condolencias mientras avanzan los operativos de rescate en medio de los escombros de la ciudad de Amatrice y aumentan los reportes de fallecimientos a causa de la tragedia. También imploró a Cristo, «quien siempre se conmueve ante la realidad del sufrimiento humano, que Él pueda consolar los corazones rotos y a través de la intercesión de la Virgen María les lleve paz». El sismo alcanzó una magnitud de 6.2 y causó la destrucción de gran parte de la ciudad.
La Conferencia Episcopal Italiana anunció la inmediata asignación de recursos por un millón de euros para cubrir las necesidades más urgentes de los damnificados. «La Iglesia en Italia se une en oración por todas las víctimas y expresa cercanía fraterna a las personas involucradas en este trágico suceso», anunció el comunicado oficial de los Obispos. «Las diócesis, la red de parroquias, institutos religiosos y las asociaciones laicales están invitados a aliviar las difíciles condiciones en que las personas se ven obligadas a vivir».
Los prelados convocaron a una colecta nacional para el día 18 de septiembre que se vincula al Congreso Eucarístico Nacional «como fruto del amor que viene de él» y habilitó varias cuentas bancarias para la admisión de donativos. El Arzobispo de Spoleto-Norcia, Mons. Renato Boccardo, se desplazó a la zona afectada «para llevar su cercanía y su apoyo espiritual a las personas después del violento terremoto», según indicó un comunicado de la Arquidiócesis. La Cáritas de Spoleto-Norcia se encuentra apoyando las labores de recuperación y realizando evaluaciones de la situación.
Los Monjes Benedictinos del Monasterio de Nursia informaron su supervivencia y lamentaron las graves heridas de los habitantes de la región. Los monjes reportaron a Scuola Ecclesia Mater muchos daños «a nuestros edificios y especialmente a nuestra basílica. Tomará algún tiempo medir la extensión del daño, pero es muy triste ver las muchas hermosas restauraciones que hemos hecho al lugar de nacimiento de San Benito reducidas, en un momento, a deterioro». Los religiosos anunciaron que contribuirán en la recuperación de la región y realizarán una nueva reconstrucción al interior del monasterio.
Con información de Crux Now, Conferencia Episcopal Italiana, Arquidiócesis de Spoleto-Norcia y Scuola Ecclesia Mater.
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