Brasilia (Jueves, 25-08-2016, Gaudium Press) A lo largo de la celebración de la palabra que inició las actividades del Consejo Episcopal Pastoral (Consep) de la CNBB este martes y miércoles, 23 y 24 de agosto, el Arzobispo de Brasilia y presidente de la Conferencia, Mons. Sergio da Rocha, afirmó que debemos «manifestar la misericordia de Dios por medio de nuestra vocación».
En medio del Mes Vocacional, fue propuesta la temática «Vocación: don de la divina Misericordia».
De acuerdo con Mons. Sergio, el texto del Evangelio de San Marcos, que narra el momento cuando un hombre pregunta a Jesús lo que debe hacer para ganar la vida eterna y Él «mirándolo, con amor» responde que debe vender sus bienes, dar el dinero a los pobres y seguirlo, recordó que «toda la vocación en la Iglesia tiene su origen en la mirada compasiva de Jesús».
En su reflexión, el prelado recordó que el «mensaje del Evangelio resalta la mirada de Jesús a aquel y aquella que es llamado. Jesús miró con compasión, con misericordia».
Para el presidente de la CNBB, la vocación, en la propuesta de meditación, «es siempre don de la misericordia de Dios, fruto de la compasión de Dios», pues «no es una afirmación teológica, sino una experiencia que nosotros vamos haciendo en la propia vida y, como nuestra vocación, en el origen de ella está la compasión, la misericordia de Dios».
Además, Mons. Sergio explicó que la misericordia no se expresa solo en el perdón, en el momento de fragilidad, en el momento de pecado, pero también como «ternura de Dios, como gracia, gratuidad».
«Nuestra vocación da los frutos esperados por Dios por medio de la misericordia», afirmó. Mons. Sergio concluyó recordando a las personas que sufren y necesitadas de la mirada compasiva y misericordiosa de Dios por medio de los ojos de los vocacionados y vocacionadas, cuya fuente y sustento es la misericordia. «Debemos manifestar la misericordia de Dios a través de nuestra vocación», concluyó. (LMI)
De la redacción Gaudium Press, con informaciones de la CNBB.
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