Roma (Martes, 13-09-2016, Gaudium Press) No es innegable que los niños, en su inocencia y humildad, son quienes tienen las preguntas más trascendentales sobre el sentido de la vida y el porqué de las cosas. Recogiendo varias de estas cuestiones, para darles una respuesta desde la fe, fue presentado recientemente en Roma el libro «Le domande grandi dei bambini», que traduce «Las preguntas grandes de los niños». Una obra que vendrá a acompañar las tradicionales catequesis de los pequeños.
Los interrogantes fueron recogidas por Mons. Andrea Lonardo, director de la Oficina de Catequesis de la Diócesis de Roma, y del Padre Maurizio Botta, vicario parroquial de Santa María in Vallicella, y reunidos en nueve capítulos ahora publicados por la editorial Itaca. En cada uno de ellos se aborda en profundidad una de las preguntas realizadas por los niños.
«Deseamos que los catequistas sean más conscientes de las preguntas grandes que los niños llevan en el corazón»: Padre Botta.Foto: Itaca Edizioni |
Sus autores tardaron tres años en compilar las preguntas y darles una respuesta. «Me acuerdo en el curso de los años que de verdad los niños hacían preguntas difíciles, deslumbrantes», comenta el Padre Botta, quien es citado por RomaSette.it, medio de comunicación de la diócesis romana.
Señala que allí se recogen toda clase de preguntas que hablan del dolor, la muerte, el sufrimiento, la afectividad, el sentido de la vida, la fe, entre otras. «Los niños no viven un mundo de cuento, les gusta ser tomados en serio y exigen respuestas honestas».
El sacerdote asegura que los adultos, padres de familia y catequistas, muchas veces debemos encontrar el valor «para ser creíbles de frente a aquellos ojos profundos que los niños tienen. No queremos que sean tratados de manera infantil y deseamos que los catequistas sean más conscientes de las preguntas grandes que los niños llevan en el corazón, preguntas a las que debemos responder».
Para dar un adecuado acompañamiento a los niños y también a los padres, cada una de las preguntas vienen tratadas en clave doble: por un lado el Padre Botta se dirige a los pequeños, por el otro Mons. Lonardo, le habla a los padres de familia.
Elemento que también promueve y facilita el diálogo entre los padres y sus hijos, entre los catequistas y los pequeños. «Hay que luchar con la infantilización de la catequesis, no basta con indicar metodologías abstractas en el momento en que el catequista tiene necesidad de un punto de referencia: palabras, reflexiones, imágenes (…) El enfoque es experiencial, parte de la necesidad que emerge y se desarrolla de manera creativa», comenta Mons. Lonardo, también citado por RomaSette.it.
El director de la Oficina de Catequesis dice igualmente que «todo niño tiene dentro de sí las grandes preguntas sobre el infinito: los más pequeños quieren saber no cómo se hace una cosa, sino porqué se hace. En esto consiste el ser verdaderamente grandes».
«Si Dios ha creado el mundo, ¿Quién ha creado a Dios?», «¿Dios sabe mi nombre?», «¿Por qué existe el odio?», » ¿Por qué Jesús quiere que lo comamos?», son algunas de las preguntas recogidas en el libro.
De la redacción de Gaudium Press, con información de RomaSette.it.
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