Con procesión de la Virgen del Carmen se celebró el tradicional Día de Oración por Chile

Santiago (Lunes, 26-09-2016, Gaudium Press) Cerca de 10 mil personas participaron el domingo 25 de septiembre en la celebración del Día de Oración por Chile. En esta ocasión, se festejó también el 90° aniversario desde que la Virgen del Carmen fue proclamada como Patrona de Chile y de las Fuerzas Armadas y de Orden.

Bajo el lema «Protégenos bajo tu manto», los peregrinos se congregaron en el frontis de la Catedral Metropolitana para iniciar la procesión de la histórica imagen de la Madre de Dios por las céntricas calles de la capital chilena. Escoltada por un orfeón escolar y saludada a su paso con banderas chilenas y vítores, la imagen de la Virgen avanzó solemne a su destino en Plaza Bulnes.

La ceremonia fue presidida por el Arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, y contó con la participación de representantes de las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad.

En su mensaje, el prelado agradeció la masiva convocatoria a esta celebración: «Gracias por estar aquí, gracias por haber traído a sus niños, tantos niños que aprenden de su corazón de padre, de madre, de abuelos o de abuelas que siempre pueden mirar hacia arriba, porque María es Madre y no es Madre que se quede lejos, es una Madre que ha venido a caminar junto a sus hijos y que lo único que quiere es que le abramos al puerta de nuestra casa, para que en ella, ella vaya construyendo paz, amor, unidad, perdón, donde haya necesidad de perdón».

Y agregó: «Hoy queremos decirte, Virgen del Carmen, que tú eres nuestra Madre, que te acogemos con amor y te pedimos que bendigas a nuestro pueblo, que bendigas a nuestra ciudad de Santiago, que bendigas de una manera muy particular a los pobres, a los afligidos, a los enfermos, a los que están privados de libertad, a los que no tienen esperanza en su corazón. Para todos sé Madre de Misericordia, ampáranos en tu manto, un manto ancho en el cual tú quieres acoger a todos, para demostrarnos tu amor, para demostrarnos que eres Madre y Reina de esta patria nuestra».

Finalmente, el obispo destacó las numerosas muestras de piedad popular de los asistentes y el gran amor del pueblo chileno por la «carmelita». «Muy queridos hermanos y hermanas, que testimonio de fe tan hermoso el de esta tarde, un testimonio de fe que cada uno de ustedes ha aportado para que sea un grito de amor y de confianza en nuestra Madre, la Virgen del Carmen», dijo.