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Asunción (Martes, 15-09-2009, Gaudium Press) Una delegación de tres sacerdotes polacos y una teóloga del Vaticano se encuentran recorriendo algunas localidades del Paraguay, con la finalidad de conocer mejor la situación del país y las actividades desarrolladas aquí por el Papa Juan Pablo II durante su visita a esta nación sudamericana en mayo de 1988, como parte del trabajo de recolección de datos tendientes a formar parte del proceso de beatificación del difunto Pontífice.
Según informó la periodista Sara Fischer, del Vicariato Apostólico del Pilcomayo, la delegación del Vaticano participó el pasado fin de semana en las celebraciones de la fiesta de la Santa Patrona Santa María, en la catedral de la ciudad de Mariscal Estigarribia, en el corazón del Chaco paraguayo, donde se desarrolló un programa especial.
En ausencia del Obispo, monseñor Lucio Alfert, quien se encuentra en Alemania, se tuvo la presencia solidaria de los obispos de la diócesis de Benjamín Aceval, monseñor Cándido Cárdenas y del Vicariato del Chaco, monseñor Edmundo Valenzuela, quien presidió la Santa Misa y en su homilía llamó la atención sobre la libertad del hombre de elegir el camino, del bien o del mal, y advirtió acerca de las consecuencias de cada camino.
El grupo integrado por tres sacerdotes polacos y una teóloga, llegó a la ciudad siguiendo las huellas del Papa Juan Pablo Segundo, dialogaron con miembros de la jerarquía, con los feligreses católicos y habitantes en general de la ciudad de Mcal. Estigarribia, uno de los puntos principales de la visita de Su Santidad en la década de los 80, ocasión en que mantuvo un encuentro especial con comunidades aborígenes de la zona.
La carismática figura de Juan Pablo II está siempre en el recuerdo y en la oración de millones de católicos paraguayos que lo recuerdan con particular afecto y devoción.
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