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La Rioja (Miércoles, 30-11-2016, Gaudium Press) Ayudar a las familias más afectadas ante la actual emergencia económica, para que pueden tener una cena en la noche de Navidad es la propuesta que ha hecho Mons. Marcelo Daniel Colombo, Obispo de la Rioja, Argentina, a los fieles de su diócesis para este Adviento.
El prelado, a través de una carta pastoral, ha convocado a vivir un tiempo preparatorio de la Navidad de una manera solidaria y fraterna.
«Apenas concluido el Año de la Misericordia, el Papa Francisco nos invita a seguir abriéndonos a la acción de Dios que nos ama, todo ternura y fidelidad al hombre, su hijo amado. La situación de tantos hermanos y sus familias que transitan tiempos duros, de fragilidad e incertidumbre laboral, compromete nuestra capacidad para discernir los signos de los tiempos y buscar cómo repechar juntos estas dificultades», escribe Mons. Colombo en la misiva.
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| Mons. Colombo anima a las comunidades y movimientos a compartir una cena cena navideña con los más pobres. |
Como gesto concreto de misericordia, el prelado convoca a sacerdotes y fieles para que hagan un esfuerzo al concluir el año, y junto con los equipos parroquiales de Cáritas, así como con los animadores y catequistas, se detecten a las familias más afectadas por la actual emergencia económica, para ayudarles con alimentos que se colecten durante las celebraciones litúrgicas de Adviento.
«Si hay cenas de grupos que despiden el año, prevean una contribución especial para ayudar a aquellas familias que ustedes mismos hayan podido reconocer que están en la peor situación. Si bien es cierto que ya pasó el invierno con su rigor climático, este tiempo de fiesta golpea adicional y afectivamente al corazón de una familia que la está pasando mal. ¡Hagamos nuestra la cercanía del Dios que viene!», agrega el Obispo de La Rioja.
Mons. Colombo sugiere a las comunidades parroquiales y a los movimientos eclesiales realizar una cena navideña para los más necesitados: «Si en las parroquias, comunidades y movimientos pudieran organizarse para una mesa navideña abierta a los más pobres, este signo coronaría un Adviento fraterno y solidario».
En la misiva, el prelado también exhorta a un mayor acercamiento a la Palabra de Dios durante el tiempo de Adviento: «El tiempo de Adviento nos pide una mayor cercanía con la Palabra de Dios para conocer su voluntad. Se trata de aquella proximidad que nos ayude a entrar en el espíritu de la Navidad con un corazón verdaderamente cristiano. La Biblia siempre apela con sencillez a imágenes y conceptos que nos llevan a Jesús, el Niño Dios que se hace uno de nosotros».
Invita de modo especial a compartir las Sagradas Escrituras en familia o al interior de las comunidades: «nos resulta necesario transitar este ciclo litúrgico abordando sus lecturas bíblicas, celebrar la Palabra en reuniones y comunidades y descubrir su propuesta de amor, manifestada en Cristo su Hijo que viene para salvarnos».
«La Palabra de Dios nos preservará del individualismo y de toda superficialidad ante la gran fiesta del Amor de Dios que nace y se hace todo nuestro», puntualiza.
Con información de AICA.
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