Ciudad del Vaticano (Lunes, 12-12-2016, Gaudium Press) La Basílica de San Benito en Nursia, Italia, el más notable de los templos destruidos por los terremotos del centro del país, tiene una presencia simbólica en la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Junto al pesebre y el árbol de Navidad, se instaló una de las cruces exteriores de la Basílica con el fin de recaudar fondos para el proyecto de reconstrucción del templo.
La dramática presencia de la cruz alienta la cooperación en favor de la reconstrucción. Foto: Aleteia. |
«Situado junto a la escena de la Natividad, como una invitación a la cooperación y la solidaridad, se encuentra una piedra de la fachada de la Basílica de San Benito en Nursia, un templo que se ha convertido en icono del terremoto reciente terremoto que ha afectado diferentes regiones de Italia central», explica un anuncio instalado en la Plaza por el Governatorato del Estado de la Ciudad del Vaticano. «Las ofrendas voluntarias de los peregrinos y turistas dejadas cerca del pesebre serán destinadas a la reconstrucción del salón parroquial de Nursia, el cual fue gravemente dañado».
Por la extraordinaria importancia histórica de la Basílica de San Benito, edificada en el lugar de nacimiento del Santo Patrono de Europa, el proyecto de reconstrucción se ha convertido en un propósito nacional que cuenta con el apoyo de todo el continente (ver noticia anterior).
Según informó Aleteia, la presencia de la cruz de la Basílica de San Benito junto al pesebre recuerda las palabras del Cardenal Robert Sarah, Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, quien visitó a los Monjes de Nursia apenas ocho días antes de la tragedia final. Al observar el hospedaje temporal habilitado por los religiosos tras el primer terremoto, el Prefecto exclamó: «Me recuerda a Belén».
Con información de Aleteia.
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