Roma (Lunes, 12-12-2016, Gaudium Press) El sábado 10 de diciembre a las 16:30 horas el Cardenal Agostino Vallini, Vicario del Papa para la Diócesis de Roma, presidió en la Ciudad Eterna la Misa de dedicación de la Parroquia Santa Teresa de Calcuta, ubicada en el barrio Nuova Ponte di Nona, cuya construcción inició hace dos años con la colocación y bendición de la primera piedra.
De acuerdo con el párroco, el Padre Fabio Corona, quien es citado por RomaSette.it -medio de comunicación de la Diócesis de Roma-, el nuevo templo es ahora «punto de referencia en periferia (…) y el único para los más de 17 mil habitantes de nuestro distrito, caracterizado hasta ahora por la ausencia de obras públicas».
Varios elementos arquitectónicos de la nueva parroquia, evocan a la Madre Teresa de Calcuta. |
Pese a que la edificación de la parroquia inició dos lustros atrás, su historia ya lleva más de 10 años, ya que fue erigida el 5 de septiembre de 2005. Su presencia ha traído progreso al sector, como lo comentó el Padre Corona: «Cuando llegué aquí habían solo prados y sitios de construcción. La Misa y las actividades del catecismo las realizamos desde el principio en una prefabricada».
Gracias a los recursos ofrecidos desde la iniciativa del «Otto per mille», animado desde la Conferencia Episcopal Italiana, fue posible la edificación de la nueva parroquia, que cuenta hoy con amplios espacios para la labor pastoral iniciada ya hace 10 años; nuevo lugar que acogerá, como lo ha venido haciendo, a personas humildes y jubilados, que son la mayoría de la población del barrio Nuova Ponte di Nona.
Según Mons. Libero Andreatta, secretario de la Obra Romana para la preservación de la fe y la provisión de nuevas iglesias en Roma, también citado por RomaSette.it, la parroquia llega también para elevar la dignidad de los habitantes del sector: «La acción ejemplar de la Iglesia en la realización de obras extraordinarias en sectores periféricos y otros sin identidad, les dan valor y los humanizan, poniendo a disposición del territorio servicios de agregación social, que elevan la cultura, pasando también por la belleza arquitectónica».
La primera piedra fue bendecida hace dos años, pero el templo fue erigido hace 10 / Foto: Parrocchia Madre Teresa di Calcutta. |
El templo se ha dedicado a Santa Teresa de Calcuta por su gran testimonio de caridad con los más humildes, por eso es de color blanco, como el su hábito, «con el cielo como un marco, que recuerda el ribete azul», de la religiosa, según expuso el párroco.
Obra del arquitecto Marco Petreschi, la edificación cuenta con un aula litúrgica de 600 metros cuadrados que ha sido completamente revestida con mármol travertino. Cuando se observa lateralmente desde la parte externa, la iglesia recuerda a la santa postrada en oración. Además del área litúrgica, el lugar cuenta con un edificio con un salón parroquial y siete aulas para el catecismo, además de la casa parroquial.
Como regalo, la parroquia posee dos reliquias de sangre de la Madre Teresa. Una de ellas permanecerá expuesta en una urna de cristal, la otra bajo el altar junto con las reliquias de otros grandes santos: Juan Pablo II, Pio de Pietrelcina, Giovanna Beretta Molla, Gabriel y de los fundadores de la Congregación de las Hijas de la Cruz Andrea Uberto Fournet y Giovanna Elisabetta Bichier des Ages.
De la redacción de Gaudium Press, con información de RomaSette.it.
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