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Río de Janeiro (Viernes, 23-12-2016, Gaudium Press) En la entrada principal del Palacio San Joaquín, en la Gloria, los fieles y turistas tienen la posibilidad de encontrar, en esta época navideña, el mayor pesebre de la ciudad de Río de Janeiro. Con seis metros de altura y 52 piezas en tamaño real, el montaje que retrata el nacimiento del Niño Jesús fue objeto de una bendición especial concedida por el Cardenal Arzobispo Orani João Tempesta.
Para el Cardenal Tempesta, este «es un motivo de evangelización, una señal para quien pasa en frente al palacio, de recordar la verdadera esencia de la Navidad, que es el nacimiento de Jesús, donde Dios se hizo carne y está presente entre nosotros».
«Navidad es eso, esa proximidad de Dios en medio de nosotros, y consecuentemente más próximos de nuestros hermanos y hermanas», concluyó el purpurado.
El pesebre real, que estará expuesto hasta el 6 de enero, tiene figuras entre 1,70 y 1,80 metros cada una. Es la tercera vez que la
estructura fue montada. Para eso, fueron necesarios más de 50 voluntarios implicados en el montaje, que trabajaron por dos semanas.
La obra, existente hace más de diez años, es de autoría del padre y artista plástico Wanderson Guedes, párroco de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, también localizada en el barrio de la Gloria. (LMI)
De la redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Arquidiócesis de Río de Janeiro
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