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Redacción (Viernes, 13-01-2017, Gaudium Press) Un misionero salesiano está cada vez más cerca de recibir el honor de los altares. Se trata del Siervo de Dios Francesco Convertini, sacerdote de la Congregación fundada por San Juan Bosco, quien por varios años evangelizó en Bengala.
Según información de ANS, agencia de noticias de los salesianos, el pasado 10 de enero en la Sesión Ordinaria de Cardenales y Obispos miembros de la Congregación para las Causas de los Santos se declaró la opinión positiva, con todos los votos afirmativos, sobre la fama de santidad y las virtudes heroicas del Siervo de Dios.
El Padre Francesco Convertini nació en Papariello di Locorotondo, Bari, el 29 de agosto de 1898. En su juventud vivió muy de cerca la Primera Guerra Mundial ya que fue llamado para ser parte de ella. En este contexto es capturado por los austriacos y enviado a un campo de concentración, siendo liberado una vez culminó el conflicto.
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| El Padre Convertini fue por mucho tiempo misionero en Bengala. Falleció en Krishnagar, India en 1976. El pasado 10 de enero su causa tuvo opinión positiva de Cardenales y Obispos de la Congregación de las Causas de los Santos / Foto: ANS. |
Perteneciendo a la Guardia de Finanza acompañó a su Capitán a Turín, allí y gracias a su devoción a la Virgen, decide confesarse en la Basílica de María Auxiliadora, donde conoce al Padre Ángelo Amadeo, quien es uno de los biógrafos de San Juan Bosco, y comienza a ser su director espiritual.
Fue este sacerdote y confesor quien lo anima a hacerse misionero. Su primer envío fue justamente en la India donde se embarcó el 7 de diciembre de 1927 tras recibir el Crucifijo misionero de manos del Beato Padre Felipe Rinaldi, además de llevar adelante sus estudios en el instituto misionero salesiano de Ivrea, Turín. En su formación y camino misionero contó con la guía de varias figuras relevantes de la Congregación Salesiana, entre ellos el Venerable Esteban Ferrando, Mons. Louis Mathias y el Siervo de Dios Padre Constantino Vendrame.
Su mayor labor misionera la desarrolló en Bengala donde brilló por su gran celo apostólico. «A pesar de que nunca llegó a aprender muy bien la lengua Behali, nadie en Krishnagar tenía tantos amigos como él o tantos hijos espirituales entre los sabios y los ignorantes, los ricos y los pobres. Fue uno de los pocos misioneros que pudo ingresar en un hogar Hindú más allá de la entrada. Estaba siempre andando de pueblo en pueblo. El Padre Francisco era bueno, y su bondadoso amor salesiano abría los corazones de la gente; sabía cómo ser un Padre, hermano y amigo. Se entregaba a todos sin distinción: musulmanes, hindúes, cristianos (…) y era querido y venerado por todos como un maestro de la vida interior, quien tenía abundante ‘sapientia cordis'», como subrayan en el sitio web de los Salesianos de Don Bosco.
Como buen hijo de Don Bosco, el Padre Convertini también se distinguió por ser un gran apóstol de María Auxiliadora. Cuando llegó el día de su muerte el 11 de febrero de 1976 en Krishnagar, India, antes de encontrarse con Dios y Nuestra Señora, murmuró: «Santa María, nunca te di un disgusto durante mi vida. Ahora ¡ayúdame!».
Junto con el Padre Convertini, son ya 20 las Causas de Beatificación de 20 Siervos de Dios y 10 venerables que actualmente avanzan para la Familia Salesiana.
De la Familia de Don Bosco también ya son 9 los santos, entre ellos Domingo Savio, Luis Orione, Luis Versiglia y Santa María Mazzarello; y 18 beatos, entre ellos Laura Vicuña, Miguel de Rúa y Luis Variara.
Con información de ANS y Salesianos de Don Bosco.
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