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Coimbra – Portugal (Lunes, 16-01-2017, Gaudium Press) La Diócesis de Coimbra y el Carmelo de Santa Teresa anunciaron hoy que la fase diocesana de la causa de canonización de la Hermana Lucía llegó al fin.
El proceso pasa ahora a la competencia directa de la Santa Sede y del Papa.
Clausura del Proceso Diocesano
La Diócesis de Coimbra revela además, en una nota publicada el viernes en el diario diocesano ‘Correo de Coimbra’, que «la sesión solemne de clausura de la Investigación Diocesana del Proceso de Beatificación y Canonización de la Sierva de Dios Lucía de Jesús se realiza el 13 de febrero, en el Carmelo de Santa Teresa», en Coimbra.
La investigación diocesana «reúne todos los escritos de la Hermana Lucía, los testimonios de los (60) testigos oídos acerca de [su] fama de santidad y de [sus] virtudes heroicas», agrega la Diócesis de Coimbra.
«Después de la Sesión de Clausura, todo el material recogido será entregado en la Congregación de las Causas de los Santos, en Roma, que dará el adecuado seguimiento, de acuerdo con las normas establecidas por la Iglesia», adelanta el Santuario de Fátima, en su página oficial, en internet.
Hermana Lucía
La hermana Lucía de Jesús, cuyo proceso de canonización entra ahora en una nueva fase, es considerada como la memoria de las Apariciones de Nuestra Señora en la Cova de la Iria, que ocurrieron entre los meses de mayo y octubre de 1917.
Ella fue una de las videntes que testimoniaron seis apariciones de Nuestra Señora en la Cova de la Iria, según sus declaraciones, reconocidas por la Iglesia Católica.
Lucía nació en Aljustrel, Diócesis de Leiria-Fátima, el día 28 de marzo de 1907. En su ciudad natal vivió su infancia, juntamente con los beatos Francisco y Jacinta, sus primos.
Francisca y Jacinta Marto murieron pocos años después de las Apariciones de Fátima, en 1919 y 1920, respectivamente; Lucía quedó «más algún tiempo», como le dijo Nuestra Señora en la aparición del 13 de junio de 1917.
Después de las Apariciones de Fátima, Lúcia Rosa dos Santos, entró al Colegio de las Hermanas Doroteas, en Porto, en 1921, congregación donde fue religiosa a partir de 1928, permaneciendo en la Comunidad de Tuy y Pontevedra, en Galicia.
El día 25 de marzo de 1948, la Hermana Lucía entró al Carmelo de Santa Teresa en Coimbra, donde tomó el hábito de carmelita el día 13 de mayo de 1948 y profesó el 31 de mayo de 1949.
Testigo vivo
Por indicación del obispo de Leiria Mons. José Alves Correia, la Hermana Lucía redactó las memorias de las Apariciones de Fátima entre 1935 y 1941, cuya edición crítica fue publicada en septiembre de 2016, las cuales fueron retomadas a pedido de monseñor Luciano Guerra, rector del Santuario.
El día 13 de mayo de 1967 regresó a Fátima para participar en el Cincuentenario de las Apariciones, a pedido del Papa Pablo VI, y en las tres peregrinaciones del Papa Juan Pablo II (1982, 1991, 2000).
La Hermana Lucía murió el día 13 de febrero de 2005 y fue sepultada en el Carmelo de Coimbra; su cuerpo fue trasladado a la Basílica de Rosario de Fátima el día 19 de febrero de 2006, donde fue enterrado a lado de su prima, la vidente Beata Jacinta Marto.
El 13 de febrero de 2008, el cardenal Saraiva Martins anunció en Coimbra que el ahora Papa emérito Benedicto XVI había decidido anticipar el inicio del proceso de beatificación de la Hermana Lucía, después de aceptar el pedido de dispensa del período de espera de cinco años después de la muerte, determinado por el Derecho Canónico. (JSG)
(De la Redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Diócesis de Coimbra)
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