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Washington (Lunes, 30-01-2017, Gaudium Press) En un llamativo relato publicado por Colleen Duggan en la plataforma católica Aleteia, dos sacerdotes africanos, el P. Jean y el P. Augustine, relataron algunas experiencias que ayudan a valorar los sacramentos a través de las penalidades que la ausencia de presbíteros en zonas apartadas imponen al ministerio de la Iglesia. «El cristianismo es aún nuevo y cuando las personas se convierten están encendidas por la fe, pero no hay suficientes sacerdotes para cubrir los grandes territorios», relató el P. Augustine. «No logramos traer a Cristoa muchas personas que lo necesitan».
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| Eucaristía en Maputo, Mozambique. Foto: Gustavo Kralj / Gaudium Press |
Una de las anécdotas contadas por los misioneros sucedió con motivo de una Eucaristía en una zona rural. Tomando el único vehículo de la parroquia y recorriendo horas de camino, el P. Augustine llegó a una parte inundada del camino donde el auto no podría pasar. «¡La gente a donde intentaba llegar no había asistido a Misa en más de un mes! Tenía que llegar a ellos no podía dejarlos sin Jesús. No podía defraudarlos», recordó. tras unos minutos de espera, el sacerdote encontró a un trabajador que le prestó una bicicleta en la cual concluyó su camino con varias horas de retraso.
El sacerdote enfrentó el duro calor durante horas y llegó cubierto de sudor y polvo, pero encontró a los fieles en el templo. «La gente sólo se sentó en la iglesia a esperarme. No estaban molestos, no estaban impacientes», relató. «Ellos deseaban a Cristo en la Eucaristía y sabían que yo se los llevaría. Estaban felices de esperar hasta que yo llegara».
La redactora se cuestionó si ella misma se esforzaría tanto en llevar a Cristo a los demás, aun cuando no tiene que enfrentar grandes penalidades para hacerlo. «Los padres Gus y Jean manejan bicicletas en medio de las tierras salvajes de África para llevar a Jesús a la gente. ¿Mis conocidos al menos saben que soy católico?», se preguntó. «¿Esperaría más de una hora en un templo vacío para recibir a Cristo como esos conversos comprometidos?».
Con información de National Catholic Register.
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