Redacción (Jueves, 02-02-2017, Gaudium Press) La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), desde la Comisión de Vida Consagrada, se ha querido sumar a la Jornada Mundial de Oración por la Vida Consagrada que se celebra este 2 de febrero, solemnidad de la Presentación del Señor y festividad de la Virgen de la Candelaria. A razón de ello ha elaborado un subsidio que anima a la oración dentro de las comunidades eclesiales del país. «Consagrados y reconciliados, luz para el mundo», es el lema local de la celebración.
«Este lema es propio para la Iglesia que peregrina en Colombia y que ha asumido para el año 2017 el valor de la reconciliación, tarea principal y prioritaria de la Iglesia católica en el país, además de ser el aporte de los ministros ordenados y de todos los consagrados a la necesidad de ahondar en cada corazón, el valor evangélico de la paz y el perdón, tan urgente para nuestro pueblo», dice Mons. José Castaño Arbeláez, OAR, Obispo de Cartago y Presidente de la Comisión Episcopal de Vida Consagrada, en un mensaje que ha dirigido con motivo de la jornada.
En la misiva el prelado da gracias a Dios por todos los consagrados presentes en la Iglesia que peregrina en Colombia, uniéndose a su vez a las intenciones de las congregaciones religiosas, institutos de vida contemplativa y activa, a las sociedades de vida apostólica, a las órdenes de vírgenes y a las nuevas formas de vida consagrada que han surgido en el país.
Mons. Castaño Arbeláez resaltó la labor que han hecho los consagrados en Colombia / Foto: CEC. |
A todos ellos, Mons. Castaño Arbeláez invita a unir esfuerzos «en la búsqueda de una auténtica y profunda reconciliación, experimentando primero en nosotros mismos, esta necesidad de vivir en paz, como verdaderos hermanos, constituyéndonos así en ‘luz para el mundo'».
«Nos dirigimos a todos los consagrados, para decirles que con su entrega y amoroso servicio en la Iglesia, han de ser ‘luz para el mundo’ promotores alegres de paz y reconciliación», agregó.
El Presidente de la Comisión Episcopal de Vida Consagrada también resalta el trabajo que los consagrados han realizado en el país, comenzando con la primera evangelización, y en el anuncio del evangelio en diversos ámbitos, como la educación, el trabajo, la salud, y sobre todo, con los más pobres. «Con un gran espíritu misionero, han llevado el evangelio a diversas poblaciones, con su vida pobre, casta y obediente, iluminan este mundo y muestran a los demás el camino virtuoso del seguimiento de Cristo», subrayó.
El Departamento de Vida Consagrada elaboró un subsidio para animar la oracion de la Jornada por la Vida Consagrada / Foto: CEC. |
A los fieles llamó a no pasar por alto la solemnidad de la Presentación del Señor, reconociendo el don de la vida consagrada que, en palabras de Mons. Castaño Arbeláez, «es expresión del amor y la ternura de Dios», ya que «Dios ha escogido a hombres y mujeres para donar sus vidas al servicio del Evangelio».
El prelado finaliza el mensaje encomendado a todos los consagrados del país a la protección maternal de Nuestra Señora, proponiéndola también como modelo para todos: «La Virgen de la Candelaria, modelo de paz y reconciliación, que nunca dejó que su corazón se llenara de odios, ni de venganzas, quien por su ‘si’ generoso trajo la luz al mundo, nos permita a todos los bautizados, consagrados y ministros de Dios, transparentar su luz y ser instrumentos de la paz, el perdón y la reconciliación. Que María Santísima sostenga y acompañe siempre a los consagrados, suscite vocaciones para el servicio de la Iglesia y nos haga instrumentos de reconciliación».
Con el propósito de animar la oración en las diversas jurisdicciones eclesiales de Colombia, el Departamento de Vida Consagrada de la CEC, con el apoyo de las Hijas de María Inmaculada, elaboró un subsidio especial que contiene un esquema para la celebración Eucarística, la hora santa, el rosario y la catequesis, de la solemnidad de la Presentación del Señor y Jornada Mundial de la Vida Consagrada.
Con información de la Conferencia Episcopal de Colombia.
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