Luces en la Ciudad: Jóvenes de Madrid, España, visitan monasterios y comunidades religiosas

Madrid (Viernes, 10-02-2017, Gaudium Press) Cientos de jóvenes de Madrid, España, visitaron monasterios, casas religiosas y parroquias en la segunda jornada Luces en la Ciudad que destacó el testimonio de la vida consagrada en la Arquidiócesis. Los visitantes dialogaron con las religiosas y religiosos y a través del contacto directo lograron una idea clara de lo que significa vivir una vocación religiosa.

Momento de oración de los jóvenes visitantes con las religiosas Hijas de la Caridad en Madrid. Foto: Delegación Episcopal de Infancia y Juventud.

«Cada vez urge más mostrar la belleza de la vida consagrada.», explicó la Delegación Episcopal de Infancia y Juventud en su presentación de la jornada. «El ‘Sí’ de tantos hombres y mujeres consagrados de diversas formas y con variadísimos subrayados es la belleza de nuestra Iglesia, y queremos mostrársela a los jóvenes, conduciéndolos a sus propios lugares». La acogida de los religiosos a los jóvenes, un momento de oración, la explicación breve de su carisma, la exposición de las obras y el estilo de vida de las congregaciones constituyen una muestra de la «armónica sinfonía que el Amor de Cristo suavemente entona desde todos los puntos de la geografía de nuestra diócesis».

Como explicó a Alfa y Omega Sor Cristina, de las Hijas de la Caridad, «no se trata solo de que nos conozcan a nosotras como comunidad de vida consagrada, sino que con iniciativas como ésta surja de alguna manera en los jóvenes la pregunta vocacional». Las religiosas mostraron a los visitantes su trabajo con niños con problemas de salud y su centro de acogida para adultos de escasos recursos. «Los jóvenes escucharon de manera muy activa, se sintieron como en su casa y muchos se interesaron por hacer voluntariado con nosotras», comentó.

La jornada concluyó, tras las visitas a las casas religiosas y monasterios, con la Vigilia Adoremos en la Catedral de la Almudena, presidida por el Arzobispo de Madrid, Mons. Carlos Osoro. La Vigilia fue animada por los religiosos y consagrados jóvenes a través de lecturas, testimonio y cantos. La Arquidiócesis destacó la evidencia de los diferentes carismas en la unidad de la Iglesia. «Ningún color agota la belleza del Rostro de Cristo, sino que se incluye dentro en armonía con los demás dones y carismas que el Espíritu ha suscitado entre nosotros», expresó el comunicado.

Con información de Arquidiócesis de Madrid y Alfa y Omega.