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San Pablo (Viernes, 24-02-2017, Gaudium Press) El clero de la Arquidiócesis de San Pablo, Brasil, se reunió con el Cardenal Odilo Pedro Scherer, dando así inicio al año pastoral arquidiocesano.
En la ocasión, párrocos, vicarios y administradores parroquiales, diáconos y todo el clero de la Arquidiócesis estuvieron reunidos en el Colegio Marista Arquidiocesano, situado en la zona sur de la ciudad.
A lo largo del evento, los presbíteros reflexionaron sobre la caminata pastoral de la Iglesia en San Pablo, en el año en que la Iglesia en Brasil celebra el tricentenario del encuentro de la Imagen de Nuestra Señora Aparecida en las aguas del río Paraíba del Sur.
Mons. Odilo saludó a los obispos auxiliares y agradeció por todo el trabajo pastoral de más de cinco años de Mons. Júlio Endi Akamine, en la región episcopal Lapa. Nombrado Arzobispo de Sorocaba, el hasta ahora obispo auxiliar de la capital paulista tomará posesión en el próximo sábado, día 25 de febrero.
En seguida, al expresar una palabra de orientación y aliento a los padres, en vista de la misión a favor del pueblo de Dios en la Arquidiócesis, el Cardenal comentó el 12º plan de pastoral (2017-2020), que tiene como tema «Urgencias de la evangelización en la ciudad». «El 12º Plan Pastoral, elaborado para estar en sintonía con las Directrices de la CNBB (Conferencia Nacional de Obispos del Brasil), nos coloca delante de los grandes desafíos y urgencias pastorales que tenemos para enfrentar en la Iglesia en San Pablo», dijo.
Según el purpurado, «lo ordinario de la vida eclesial es lo que da el tono a la vida de nuestras comunidades y a nuestro servicio pastoral en la atención al pueblo en el día-a-día, en el estar junto al pueblo en sus alegrías, angustias, sufrimientos y esperanzas, en la animación y estímulo a los colaboradores, en la orientación de las iniciativas pastorales».
Sobre el 11º Plan de Pastoral en el año anterior, Mons. Odilo expuso sus conclusiones: «la evaluación del desempeño del 11º Plan de Pastoral, hecho ampliamente a lo largo del año pasado, nos hizo percibir que avanzamos en muchos frentes en la acción evangelizadora y pastoral. Al mismo tiempo, también percibimos que todavía permanecen lagunas e insuficiencias en la evangelización aquí en San Pablo».
Por último, el Arzobispo recordó que durante el cuatrienio 2017-2020, será encaminada la realización de un Sínodo Arquidiocesano, que es considerado un camino de reflexión, evaluación, renovación, planeamiento y programación, hecho con la participación de toda la Iglesia particular, a través de sus representantes y delegados. «Es un evento de gran significado eclesial y pastoral, que requiere un amplio envolvimiento de todas las fuerzas vivas de la Arquidiócesis», resaltó.
Para el Cardenal, el sínodo no deberá tener otra finalidad a no ser proponer una mirada realista para la realidad eclesial y pastoral en San Pablo, «con el deseo sincero de ser fieles a la gracia de Dios y de corresponder bien a la misión que nos está confiada en esta metrópolis». (LMI)
De la redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Arquidiócesis de San Pablo
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