Mosul (Sábado, 25-02-2017, Gaudium Press) Como un signo de esperanza por la reconstrucción de la comunidad cristiana en Irak, los cristianos que finalmente pudieron regresar a la población deTelekuf-Tesqopa erigieron una cruz monumental en la cima de una colina. La Cruz fue bendecida el pasado 18 de febrero por el Patriarca católico caldeo, Su Beatitud Louis Raphael I Sako.
La Cruz fue inaugurada en medio del júbilo de los creyentes locales. Foto: This is Christian Irak. |
La bendición del monumento cristiano es «la primera chispa de luz que brilla en todas las ciudades del Valle de Nínive desde la oscuridad de ISIS, que duró casi dos años y medio», expresó el Patriarca Sako en su homilía el día del suceso. «Esta es nuestra tierra, este es nuestro hogar». El prelado animó a los fieles a recuperar la esperanza y regresar a sus poblaciones para comenzar una nueva etapa.
El Patriarca agregó que los cristianos iraquíes demostrarán al mundo que las fuerzas e la oscuridad son efímeras mientras que la Iglesia de Cristo, aunque sufriente, está edificada sobre roca. Después de que el prelado bendijera la cruz, ésta fue elevada a su posición final mientras se encendían fuegos artificiales y los creyentes clamaban «¡Victoria!¡Victoria!¡Victoria! Por quienes eligen la fe y por quienes retornan».
Su Beatitud comentó que la presencia del monumento anuncia al mundo que «esta es nuestra tierra, aquí nacimos, y aquí moriremos». El prelado reafirmó este compromiso recordando que «nuestros ancestros fueron sepultados en esta tierra pura, y nosotros permaneceremos para preservarlos con toda nuestra fuerza y por las generaciones futuras».
Con información de National Catholic Register.
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