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Bogotá (Lunes, 03-04-2017, Gaudium Press) Un llamado a la solidaridad es el que ha hecho la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) ante el desastre natural ocurrido en la ciudad de Mocoa en la noche del 31 de marzo y madrugada del 1º de abril. Las fuertes inundaciones, ocasionadas por el desbordamiento de varios ríos, han dejado a cientos de familias damnificadas, y ocasionado la muerte a más de 200 personas.
El Episcopado colombiano, por medio de un comunicado emitido por el Secretario General del organismo eclesial, Mons. Elkin Fernando Álvarez, manifestó su cercanía con los afectados y los familiares de las víctimas:
«Los obispos católicos de Colombia, ante la grave tragedia causada por el desbordamiento de varios ríos en la ciudad de Mocoa, manifestamos nuestra cercanía con todos los damnificados, ofrecemos oraciones por el eterno descanso de las personas fallecidas y pedimos a Dios la fortaleza para quienes se han visto afectados por esta tragedia».
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| Las fuertes inundaciones, ocasionadas por el desbordamiento de varios ríos, han dejado a cientos de familias damnificadas, y ocasionado la muerte a más de 200 personas. |
También convocan a llevar adelante iniciativas que ayuden a superar la crisis: «Invitamos, así mismo, a las comunidades eclesiales, y a las personas e instituciones de buena voluntad a poner en marcha iniciativas para ayudar eficazmente a las superación de esta crisis y a los procesos de reconstrucción (…) Unidos en oración por nuestros hermanos y hermanas de Mocoa».
El Obispo de Mocoa – Sibundoy, Mons. Luis Albeiro Maldonado Monsalve, también hizo «un llamado a la solidaridad, a unirnos todos en este momento difícil, a mirar hacia esta región necesitada».
Dijo que es apremiante la ayuda a las familias damnificadas, por lo que llamó a prestar el auxilio necesario, señalando que se requiere de manera urgente agua, alientos, frazadas, colchonetas, entre otras cosas.
Asimismo, señaló que desde la diócesis se ha conformado un comité central y también un comité de vicarías foráneas, que están a cargo de escuchar, acompañar y atender a los damnificados.
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Por su parte, la Pastoral Social – Cáritas Colombiana también ha conformado un equipo técnico que ya viajó a Mocoa para brindar el apoyo necesario a la población afectada; y diócesis vecinas, como la de Cali, han iniciado campañas para colectar alimentos y también dinero, para brindar ayuda inmediata a los afectados.
Del mismo modo, se comenzó con una iniciativa de sensibilización a través de las redes sociales, con el uso del ‘hashtag’ #OremosporMocoa.
Solidaridad y cercanía del Santo Padre
El Santo Padre Francisco también expresó su cercanía con las familias afectadas y por las víctimas de la tragedia. Así lo hizo saber el Pontífice durante el rezo del Ángelus que presidió el domingo 2 de abril en el marco de la visita que realizó a la ciudad italiana de Carpi.
«Estoy profundamente apenado por la tragedia que golpeó a Colombia, donde una gigantesca avalancha de barro, en la localidad de Mocoa, dejó numerosos muertos y heridos. Oro por las víctimas y aseguro mi cercanía a cuantos lloran la pérdida de sus seres queridos, y agradezco a todos aquellos que se han agolpado al sitio para prestar ayuda», fueron las palabras del Papa.
Con información del Conferencia Episcopal de Colombia.
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