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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 12-04-2017, Gaudium Press) Un hecho que sucedió sin estar colocado en la Agenda de Francisco: él recibió en la tarde del lunes a niños que se encuentran internados en el Hospital Pediátrico Bambino Gesù (Niño Jesús), de Roma.
Los pequeños enfermos estaban acompañados de sus padres y médicos y fueron recibidos por el Papa Francisco en la Sala Pablo VI. Los visitantes hacen parte de una serie de televisión que muestra lo cotidiano de diez pequeños pacientes gravemente enfermos que presentan sus esperanzas de cura.
Después de que fueron tomadas fotos y las presentaciones, Francisco leyó el papel escrito por los jóvenes y agradeció también el libro con dedicatoria que el Papa recibió de regalo.
Hablando de imprevistos, el Santo Padre resaltó aspectos de los dos encuentros que él ya tuvo con el grupo. El primer encuentro fue el 15 de diciembre del año 2016.
En el primer encuentro, llamó la atención del Papa el hecho que los médicos conocieren a cada pequeño paciente por el nombre:
«Percibí que más que un hospital, ustedes parecen una familia», dijo.
Otro punto que llamó la atención fue el cariño con que los médicos se relacionan con los menores:
«Es el remedio más importante que la familia puede dar: ¡el cariño!».
El Papa afirmó que el Hospital Bambino Gesù es donde los niños enfermos encuentran familia y comunidad:
«Es un testimonio de humanidad, y por eso les agradezco», afirmó el Papa.
Niños Sirios
Por último, Francisco reveló que el Vaticano cedió su helipuerto para el aterrizaje de aeronaves con los niños más graves provenientes de Siria. Ellos siguen directamente de la aeronave al Hospital.
Antes de saludar a cada uno de los pequeños visitantes, conceder su bendición y pedir que rezaren por él, el Papa dijo, concluyendo el encuentro:
«El espíritu de familia es contagioso… cada uno es importante, ¡pero siempre juntos!» (JSG)
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