San Luis (Jueves, 27-04-2017, Gaudium Press) En la Provincia de San Luis en Argentina se encuentra un Santuario que todos los años reúne a miles de peregrinos en torno una especial devoción: el Santo Cristo de la Quebrada, una pequeña imagen de Jesús Crucificado, considerada por muchos, milagrosa.
En preparación a la festividad del Cristo milagroso, que ocurre cada 3 de mayo, el lunes 24 de abril comenzaron sus homenajes con el rezo de la novena en el santuario que se ubica en Villa de la Quebrada.
El novenario tiene lugar en el marco de la celebración Eucarística que se viene celebrando cada día a las 19:00 horas hasta el viernes 28 de abril, mientras que el sábado 29 de abril habrá varias Misas: a las 11:00, 17:00 y 19:00 horas; y el domingo 30 las Eucaristías de 9:00, 11:00, 17:00 y 19:00.
El Cristo milagroso de la Quebrada es una pequeña imagen, tal vez una de las más pequeñas que se veneran en Argentina / Foto: Tino Videla – Agencia San Luis. |
El 1º de mayo, se unirá la novena con la fiesta de San José Obrero, patrono de los trabajadores, también con misas sucesivas desde las 7:00 hasta las 21:00 horas. Mons. Pedro Daniel Martínez Perea, presidirá la Eucaristía de las 17:00 horas. Este día también se rezará el Santo Vía Crucis que recorre las inmediaciones del Santuario.
El martes 2 de mayo será la fiesta de Nuestra Señora de la Quebrada, este día habrá también varias celebraciones Eucarísticas y una solemne procesión que ocurrirá a las 12:00 horas.
Los festejos del 3 de mayo iniciarán a las 7:00 de la mañana con la primera Eucaristía. La Misa solemne será a las 15:00 horas, siendo presidida por Mons. Martínez Perea, quien también acompañará la procesión con la venerada imagen del Señor de la Quebrada, que saldrá de su santuario para bendecir a los fieles.
El Cristo milagroso de la Quebrada es una pequeña imagen, tal vez una de las más pequeñas que se veneran en Argentina.
Se desconocen algunos detalles sobre cómo fue su descubrimiento, pero de acuerdo con una tradición, ésta fue hallada en la primera mitad del siglo XIX por un hachero ciego, Juan Tomás Alcaráz, quien descubrió en el corazón de un árbol de algarrobo algo escondido: era el Señor de la Quebrada. Se cree que la imagen llegó a este árbol tal vez para protegerlo de los indios.
Con el tiempo se formó una villa en torno a esta imagen y cientos de fieles comenzaron a venerar la Cruz, una devoción y fe que ha llevado a obtener innumerables gracias para sus devotos. Hoy miles de personas recorren kilómetros desde varios puntos de la Argentina para rendirle tributos el día de su festividad.
En el Santuario se halla un Santo Vía Crucis con imponentes imágenes / Foto: Camino San Luis. |
Lo que llama la atención de este Cristo, además de sus dimensiones -ya que mide 27 centímetros el madero vertical, y 20 el horizontal-, es la presencia de un Jesús no agonizantes, sino muerto. El crucifijo es de color verde y sus puntas terminan de forma redonda adornadas con dorado. También es llamativo el letrero INRI -«Jesús de Nazaret, Rey de los judíos»- que mide unos 8 centímetros de largo, sobresaliendo sobre la Cruz. Completan el crucifico unos rayos que muestran el resplandor de la imagen.
Hoy el santuario que la resguarda también llama la atención por el Santo Vía Crucis que allí se construyó. Es un recorrido por la montaña que cuenta con hermosas imágenes de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo a las que acuden cientos de penitentes.
Con información de AICA.
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