Wau (Viernes, 05-05-2017, Gaudium Press) El complejo de la Catedral de Santa María en Wau, Sudán del Sur, se ha convertido en un improvisado campo de refugiados luego de que cerca de 16 mil personas se acercaran al templo en busca de un lugar seguro en medio de la oleada de violencia que azota al país. La guerra civil ha originado una grave crisis humanitaria y se han encendido las alertas ante la posibilidad de estallido de violencia étnica alimentada por intereses políticos.
Catedral de Santa María en Wau, Sudán del Sur. Foto: Chiefayic2 |
«He estado dos semanas aquí desde que los soldados nos sacaran de nuestra casa y la incendiaran», relató a CNS Rita Williams, una de las refugiadas que acampa bajo un árbol junto a la Catedral junto a sus tres niños. «No tenemos nada, ni siquiera sal. Nuestra ropa está sucia y algunos días todo lo que tenemos para comer o beber es agua. Esperamos, no sé qué, pero tenemos miedo de regresar».
La oleada de violencia afectó gravemente a Wau desde junio del año pasado, e incluso dos miembros del coro de la Catedral perdieron la vida en un ataque mientras regresaban a casa. La situación llegó a ser tan grave que algunas víctimas tuvieron que ser sepultadas en el terreno de la Catedral por la imposibilidad de llegar hasta el cementerio. La Iglesia cavó dos nuevos pozos para proveer agua y se reciben carrotanques para abastecer a los desplazados.
Los refugiados no quieren regresar a sus hogares porque no confían en las promesas de las autoridades mientras aún se pueden ver patrullas de soldados de las fuerzas del llamado Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán. Hechos de violencia confirman la inestabilidad de la situación y el incumplimiento de los acuerdos con la población sobre la retirada de las fuerzas prolongan la crisis.
La situación ha traído tensiones también para los sacerdotes, quienes son víctimas de amenazas y de quienes la población espera los defiendan en caso de un ataque. Por lo pronto, los miembros de la Iglesia se preocupan en su lugar de obtener alimentos para los refugiados a través de las agencias internacionales, conscientes de que la escasez de recursos podría también generar malestar social.
Con información de CNS.
Deje su Comentario