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Redacción (Miércoles, 17-05-2017, Gaudium Press) En la Catequesis de la Audiencia General de hoy, -y continuando con su serie sobre la esperanza cristiana- el Papa Francisco habló del encuentro de María Magdalena con el Señor Resucitado.
Recordó el Pontífice que el Evangelio habla de una primera visita de la Magdalena al sepulcro de Cristo, el cual halla abierto sin el cuerpo de Jesús. Tras esta, hay una segunda visita en la cual encuentra al Maestro, quien la llama por el nombre, destacando el Papa el carácter casi íntimo y personal de esa aparición: «Es Alguien que nos conoce, que ve nuestro sufrimiento», dijo el Papa de Jesús.
El Pontífice insistió en que Dios se interesa por nuestras vidas, Él busca transformarlas, y eso debe traducirse en gozo, como el gozo de María Magdalena descrito en el Evangelio ante el hallazgo de Jesús.
De hecho, la vida cambia después del encuentro con el Señor. Tras el hallazgo de Cristo, la Magdalena se trasforma en «apóstol de la nueva y más grande esperanza».
«¡He cambiado mi vida porque he visto al Señor! Ahora soy diferente que antes, soy otra persona. He cambiado porque he visto al Señor. Esta es nuestra fuerza y esta es nuestra esperanza», dijo el Papa.
La Magdalena también nos enseña a perseverar en la búsqueda del encuentro con Jesús. Ella nos enseña a «dejar que su encuentro trasforme nuestra tristeza en alegría y a transformarnos en sus testigo. El encuentro con el Resucitado nos resucita y nos ayuda a hacer resucitar a los otros de los oscuros sepulcros de la incredulidad».
Con información de Radio Vaticano
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