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Bratislava (Miércoles, 31-05-2017, Gaudium Press) El próximo 30 de septiembre tendrá lugar en Bratislava, Eslovaquia, la Beatificación del sacerdote salesiano Padre Titus Zeman, defensor de las vocaciones. Con motivo de este acontecimiento, los Salesianos de Eslovaquia, en unión con la Arquidiócesis de Bratislava, han iniciado un camino de preparación que involucra tres aspectos: la oración, el conocimiento del Padre Zeman y su carisma, y la preparación litúrgica y técnica del evento.
Con respecto a la oración, por estos días se viene promoviendo la novena para solicitar la gracia de un milagro atribuido al próximo beato, para así avanzar hacia su canonización. «Muchos son los que invocan la intercesión del beato por las vocaciones y la perseverancia», asegura la agencia de noticias ANS de los salesianos.
Asimismo, se han incrementado los encuentros, conferencias y programas de catequesis transmitidos por radio y televisión, así como documentales, para profundizar en la vida e historia del sacerdote salesiano; y se ha puesto a disposición el sitio web tituszeman.sk con información más completa disponible en eslovaco, italiano, inglés y español.
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| El padre Titus Zeman fue defensor de las vocaciones / Foto: Titus Zeman. |
La liturgia será especial, dándole realce al sacerdote, quien se convertirá en patrón de las vocaciones sacerdotales y religiosas, de la vida matrimonial y de la formación de las familias cristianas, en espera de los miles de peregrinos que llegarán a Bratislava para la beatificación del mártir.
El Padre Titus Zeman nació el 4 de enero de 1915 en Vajnory, Bratislava, al interior de una familia con profundos valores cristianos. Su deseo por ser sacerdote llegó a los 10 años, vocación que orientó inspirándose en el carisma de San Juan Bosco y realizando sus estudios secundarios en las casas salesianas de Sastín, Hronský Svätý Benedikt y Fristak y Holesova. En 1931 realiza el noviciado, y el 7 de marzo de 1938, en la Basílica del Sardo Corazón de Roma, emite su profesión perpetua.
Su consagración sacerdotal llegó el 23 de junio de 1940 de manos del Cardenal Maurizio Fossati, y en una ceremonia que tuvo lugar en la Basílica de María Auxiliadora, en Turín. Su primera Misa ocurrió el 4 de agosto de 1940 en Eslovaquia.
En 1950, cuando el régimen comunista prohibió las órdenes religiosas, ordenando deportar a los consagrados y consagradas a los campos de concentración, el Padre Zeman organizó dos viajes clandestinos a Turín para que 60 jóvenes salesianos pudiesen completar sus estudios. Al intentar organizar el tercero, resulta detenido, junto con algunos jóvenes.
Es catalogado por el régimen como traidor a la patria y espía del Vaticano, siendo condenado a varios años de cautiverio. Alcanza su libertad el 10 de mayo de 1964, pero ya marcado por los sufrimientos que vivió, muere con fama de martirio y en olor de santidad el 8 de enero de 1969.
La investigación diocesana para su causa de Beatificación y Canonización comenzó en el 2007, siendo reconocida por la Congregación para las Causas de los Santos el 28 de junio de 2013. Tras prepararse la ‘Positio’, se discutió si la muerte del Padre Zeman podría considerarse un verdadero martirio, teniendo aprobación por parte del Congreso Especial de Consultores Teólogos el 7 de abril de 2016. En la sesión ordinaria de los Cardenales y Obispos del 21 de febrero de 2017 se reconoció que el Siervo de Dios murió por su fidelidad a Cristo.
Oración por la canonización del Padre Titus Zeman
Dios todopoderoso, has elegido a tu servidor Titus Zeman para seguir el carisma de San Juan Bosco. Bajo la protección de María Auxilio de los Cristianos se convirtió en un sacerdote y educador de la juventud. Vivió de acuerdo con los mandamientos de Dios y por su carácter amable y dispuesto a ayudar era muy popular entre la gente. Cuando los enemigos de la Iglesia recurrían a los derechos humanos y a la libertad de religión, el sacerdote Titus no perdió el valor y la perseverancia a la verdad. Por la lealtad a su vocación salesiana y al servicio abnegado a la Iglesia fue encarcelado, ridiculizado, humillado y torturado, pero con valentía resistía a sus torturadores. Todo esto sufría por el amor y con amor. Te rogamos, Dios eterno, glorifica a Tu siervo fiel Titus. Te pedimos por su canonización en el Nombre y por la mediación de Jesucristo y por la intercesión de su madre María Auxilio de los Cristianos. Amén.
Con información de ANS y tituszeman.sk.
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