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Ciudad del Vaticano (Miércoles, 07-06-2017, Gaudium Press) – Una de las Audiencias que el Santo Padre concedió al iniciar su semana de trabajos, el pasado lunes, fue realizada en la Sala Clementina, en el Vaticano.
Allí, Francisco recibió a 120 participantes en los Capítulos Generales de los Misioneros y Misioneras de la Consolata, la Congregación que tiene como fundador al bienaventurado Giuseppe Allamano.
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| Bienaventurado Giuseppe Allamano |
Estímulo
Que los trabajos Capitulares se desarrollen en clima de serenidad y docilidad al Espíritu, fue el primero de los deseos del Papa expresados a los capitulares de la Consolata.
Pero el Pontífice no dejó de también alentarlos a proseguir con generosa fidelidad su misión «ad gentes». Ellos que, muchas veces, actúan en condiciones bien difíciles en los diversos rincones de la Tierra.
Sugerencias y recuerdos
Francisco ofreció sugerencias a los Misioneros capitulares de la Consolata:
«Me gustaría exhortarles a hacer un atento discernimiento sobre la situación de los pueblos, entre los cuales desempeñan su acción evangelizadora. Jamás se cansen de llevar conforto, sobre todo a aquellos que se encuentran en situaciones de gran pobreza y sufrimiento, sobre todo en África y América Latina. Busquen dar su testimonio de caridad, que el Espíritu infunde en sus corazones», les dijo el Santo Padre.
Es preciso vivir en comunión con Dios, dijo el Papa, solo así podrán llevar adelante su compromiso misionero.
La vida religiosa puede tornarse una caminata alegre en el redescubrimiento progresivo del amor y la misericordia divinos. Ella puede tornarse además en nuevos «areópagos» de la evangelización, recordó el Papa. (JSG)
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