Baghdad (Miércoles, 05-07-2017, Gaudium Press) El Patriarca Louis Raphael Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos y Presidente de la Conferencia Episcopal Iraquí, publicó una serie de lineamientos en los que destaca la responsabilidad de los cristianos locales en la tarea de reconstruir la sociedad local tras la devastación por la ocupación del grupo terrorista ISIS. «Hasta hoy, la Iglesia es la única entidad activa en el campo de la reconstrucción», comentó el prelado.
Patriarca Louis Raphael Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos. Foto: Bundesministerium für Europa, Integration und Äusseres. |
El Patriarca rechazó la injerencia de intereses externos y reclamó la necesidad de que sean los habitantes locales los que determinen el futuro de la región, quienes están llamados a «valerse del realismo y de la racionalidad después de un largo período de enormes sufrimientos». El prelado destacó la larga historia de convivencia de los cristianos con los no creyentes y su habilidad para construir relaciones de armonía con sus vecinos, la cual » no puede ser redimensionada después de las atrocidades y los hechos perpetrados por el Isis».
Entre las tareas ineludibles de las comunidades locales, el Patriarca Sako destacó la urgencia de «ponerse de acuerdo sobre exigencias en común que sean aceptables, que sean realizadas según la Constitución y las leyes internacionales», así como la de «garantizar seguridad y estabilidad, evaluando la posibilidad de solicitar un control internacional para garantizar la paz en la región». El prelado reconoció el aporte y sufrimiento propio de los iraquíes en la diáspora, pero pidió reconocer que son los cristianos locales quienes tienen la información suficiente para entender la realidad en la región y por tanto son ellos quienes deben liderar los procesos de reconstrucción social y material.
«Esta es también la ocasión para lanzar un pedido al gobierno iraquí, para que cumpla con sus obligaciones en lo que respecta a garantizar la seguridad y el estado de derecho; para que reconstruya estas ciudades con todas sus casas, escuelas, instituciones, oficinas públicas, hospitales e iglesias; y para que se ayude a los ciudadanos escuchándolos y brindando respuestas positivas a sus legítimos pedidos y aspiraciones, que son reales», afirmó, hablando en nombre propio y de los 20 prelados de la Iglesia Católica Caldea. «Concluyo augurándome que este pedido pueda constituir el compromiso mínimo en relación a aquello que el gobierno está llamado a hacer».
Con información de AsiaNews.
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