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La Plata (Jueves, 21-09-2017, Gaudium Press) Ante algunas quejas «respecto de la transmisión de cuestiones esenciales en diversas asignaturas» en colegios católicos, el Arzobispo de La Plata, Argentina, Mons. Héctor Aguer, emitió un decreto en el cual hace explícito el deber de las instituciones educativas católicas de mantener su fidelidad a la doctrina de la Iglesia, contenida de manera segura en el Catecismo de la Iglesia Católica. «A ningún docente le está permitido transmitir lo contrario de lo que en él se contiene, y a su tenor debe juzgarse la validez y licitud de textos o apuntes ofrecidos o recomendados en uso a los alumnos», estableció el prelado.
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| Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata, Argentina. Foto: Arzobispado de La Plata. |
El Arzobispo recordó que es su deber «velar para que en los niños, adolescentes y jóvenes no se frustre la finalidad propia de la educación católica», por lo cual exigió a los colegios que dependen directamente de su autoridad, así como los que son propiedad de comunidades religiosas, observar «con toda fidelidad y diligencia las orientaciones» contenidas en el decreto para garantizar la promoción adecuada de su identidad católica.
«La Enseñanza Religiosa Escolar y la Catequesis tienen como referencia doctrinal insoslayable el Catecismo de la Iglesia Católica y el Compendio del mismo», determinó el prelado como primer acápite del decreto. «Los textos que se usen y las explicaciones de los profesores y catequistas deben ajustarse siempre a aquellos instrumentos para mostrar a los alumnos, sin ambages, la verdad católica, con los métodos y actividades que correspondan a la edad de los educandos». Los educadores deben advertir sobre los errores y conductas contrarias a la fe presentes en la cultura actual para evitar que los alumnos caigan en ellos.
Mons. Aguer hizo un énfasis especial en la «educación para el amor, la castidad, el matrimonio y la familia», temas sobre los cuales pidió seguir los lineamientos contenidos en el documento «El orden del espíritu en la sexualidad. Aportes preliminares al ordenamiento de la educación sexual en la escuela». «Prohíbo expresamente que en esta área tan delicada y bella se recurra como fuente de inspiración a la ‘teoría de género’ y a los textos que la sostienen», ordenó. «En el momento oportuno hay que exponer con argumentos sólidos una crítica de esa teoría, hoy ampliamente difundida, que pretende negar las diferencias biológicas entre el varón y la mujer, de modo que los alumnos puedan discernir rectamente y no sean arrastrados por este error».
De igual manera, pidió inspirar las asignaturas relacionadas con el orden social, político y económico tanto en el Catecismo de la Iglesia Católica como en el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia. «Espero de los Representantes Legales, Directivos, catequistas, capellanes y docentes el cumplimiento de estas disposiciones con sinceridad, prudencia sobrenatural y caridad», exhortó el prelado. «Encomiendo a la Junta Regional de Educación Católica la inspección permanente, en el orden doctrinal y el pedagógico, de estas indicaciones, para que se asegure la plena identidad católica, tanto de las instituciones que se encuentran bajo su inmediata dependencia, cuanto de los colegios pertenecientes a congregaciones religiosas, cuyos alumnos, en cuanto tales, son fieles de esta Iglesia Particular».
El documento está fechado en el 14 de septiembre de 2017, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz.
Con información de AICA.
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