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Ciudad del Vaticano (Lunes, 09-10-2017, Gaudium Press) El intento de neutralizar la «diferencia sexual» recurriendo a la tecnología «no es correcta» y pone en causa la «transmisión generativa de la vida». Esas fueron palabras del Papa Francisco durante un discurso a los participantes de la asamblea general de los miembros de la Academia Pontificia para la Vida.
El Papa dijo en su pronunciamiento que «la hipótesis recientemente avanzada de reabrir el camino para la dignidad de la persona humana neutralizando radicalmente la diferencia sexual y, así, la comprensión del hombre y de la mujer, no es correcta». Y además continuó Francisco en su discurso: «En vez de contrastar una interpretación negativa de la diferencia sexual, que penaliza su valor irreductible para la dignidad humana, se pretende acabar con el hecho de tal diferencia, proponiendo técnicas y prácticas que la tornan irrelevante para el desarrollo de la persona y para las relaciones humanas»,
Utopía de lo Neutro
En sus declaraciones a los participantes de la Asamblea General de la PAV, Francisco consideró que la «utopía de lo neutro» coloca en causa, por un lado, la «dignidad humana de la constitución sexualmente diferente y la calidad personal de la transmisión generativa de la vida».
El Papa continuó su discurso subrayando con énfasis que la «manipulación biológica y psíquica de la diferencia sexual, que la tecnología biomédica deja entrever como totalmente disponible a la elección de la libertad -¡Cuando no lo es!- corre el riesgo de desmantelar la fuente de energía que alimenta la alianza del hombre y de la mujer la torna creativa y fecunda».
Tema
El tema del Encuentro de los miembros de la Academia Pontificia para la Vida fue «Acompañar la vida. Nuevas responsabilidades en la era tecnológica» y Francisco lo consideró en el discurso de apertura del evento como siendo «desafiante» y «necesario».
Antes de encerrar su pronunciamiento durante la audiencia a los miembros de la Academia Pontificia para la Vida, el Papa se refirió al «materialismo tecnocrático» que hace «promesas ilusorias» de «bienestar», en expansión al ritmo del mercado, mas provoca sobre todo el crecimiento de «territorios de pobreza y de conflicto, del desperdicio y del abandono, del resentimiento y del desespero». Para Francisco, «un auténtico progreso científico y tecnológico debería inspirar políticas más humanas». (JSG)
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