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Varsovia – Polonia (Lunes, 09-10-2017, Gaudium Press) Más de un millón de personas se reunieron el día sábado 7 de octubre a lo largo de 3.500 kilómetros de las fronteras de Polonia, país donde nació el Papa Juan Pablo II. Se reunieron pidiendo a Dios a través de la intercesión de la Virgen María la paz del país y la del mundo. Las oraciones se extendieron hasta el Mar Báltico, las montañas que separan al país de Eslovaquia y República Checa, así como en el resto de las fronteras.
El rezo del Santo Rosario se tituló «Rosario sin Fronteras», fue convocado por laicos y contó con el apoyo de obispos y sacerdotes. Antes de iniciar el rezo de la oración mariana, los feligreses se congregaron en unas 300 Iglesias de 22 Diócesis.
El 90% de los habitantes de Polonia se declaran católicos y poseen una profunda piedad mariana. Este año se celebran los 300 años de la primera coronación canónica de Nuestra Señora de Czestochowa, patrona de este país ubicado en el centro de Europa. Los organizadores del evento también afirmaron que también conmemoraban el centenario de las apariciones de la Virgen en Fátima, cuando tres niños vieron a la Virgen María que se les apareció en seis ocasiones desde el 13 de mayo hasta el 13 de octubre, haciendo una excepción en agosto ya que la aparición en ese mes ocurrió el día 19.
La primera ministra Beata Szyd?o mostró su apoyo al twittear una imagen de cuentas de rosario con un crucifijo y enviar saludos a todos los participantes.
Halina Kotarska, una habitante de este país con 65 años, viajó 145 millas a la frontera desde su casa en Kwieciszewo, ubicada en Polonia Central. Ella quiere expresar su gratitud, ya que su hijo de 29 años sufrió un accidente automovilístico serio este año y logró sobrevivir.
Ella también estaba orando por la supervivencia del cristianismo en Polonia y Europa que ella ve amenazado por el extremismo islámico: «Quieren alejarnos del cristianismo», según recogió el Catholic Herald.
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