Washington (Jueves, 02-11-2017, Gaudium Press) El Cardenal Daniel DiNardo, Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), lamentó en un comunicado oficial el ataque terrorista sufrido en las calles de la ciudad de Nueva York, cuando un hombre arrolló con su vehículo a los transeúntes de una vía exclusiva para bicicletas. El purpurado calificó el hecho como «un acto horrendo» que «nos pesa a todos en el corazón».
Cardenal Daniel DiNardo, Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos. Foto: Arquidiócesis de Boston. |
«A las familias y amigos de aquellos que han muerto, sepan que no están solos y que las oraciones de los Obispos y de toda la Iglesia están con ustedes y sus seres queridos», expresó el Cardenal. «A ustedes ya todos me gustaría decir que las fuerzas de la oscuridad siempre intentan eliminar nuestra esperanza, pero nuestra esperanza es el Nombre del Señor y siempre se mantendrá firme». Para animar a los fieles, el purpurado recordó las palabras del Profeta Josué: «No teman ni desfallezcan, porque el Señor, su Dios, está con ustedes donde quiera que vayan».
Además de la declaración del Cardenal Dinardo, el Cardenal Timothy Dolan, Arzobispo de Nueva York, publicó una declaración en la que lamenta el hecho, recordando que «nuestra nación y ciudad están aturdidas y horrificadas por otro acto de violencia sin sentido». El prelado animó a dejar de lado las diferencias y a «acudir juntos con fe y amor a apoyar a los heridos, orar por los que han muerto y por sus familias y seres queridos, y trabajar por un mayor respeto y entendimiento entre todas las personas, para que los actos abyectos y malvados como éste se conviertan en algo del pasado».
El Arzobispo programó una Eucaristía en memoria de todos los fallecidos y heridos por el ataque del día martes, además de orar por la seguridad y la protección de la ciudad de Nueva York. La celebración se realizará en la Catedral de San Patricio el domingo 05 de noviembre a las 10:15 am. Entre los ocho fallecidos en el ataque se encontraban cinco ciudadanos argentinos provenientes de la ciudad de Rosario, quienes viajaron con otros cinco compañeros de estudio para celebrar los 30 años de su graduación escolar. Por este motivo el Arzobispo de Rosario, Mons. Eduardo Eliseo Martín, y la Conferencia Episcopal Argentina, emitieron una declaración en la que piden que «el Señor Jesús, consuelo y fortaleza del creyente, los conduzca a la alegría de la felicidad eterna» y dé a sus familiares y amigos «el don de la esperanza que reconforta en los momentos más difíciles, para seguir confiando en su misericordia que alivia y da serenidad y paz».
Con información de USCCB y AICA.
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