Sin la Sagrada Eucaristía no hay vida divina dentro de la familia: Cardenal Pengo

Dar es Salaam (Sábado, 18-11-2017, Gaudium Press) Los Obispos de Tanzania, reunidos en el Simposio Eucarístico celebrado en el Centro Msimbazi en la Archidiócesis de Dar es Salaam, pidieron a las familias fomentar la devoción eucarística en los hogares como medio eficaz para obtener la estabilidad familiar y la evangelización continua. El lema del Simposio estuvo dedicado a este tema y los prelados reiteraron el llamado, una de las claves de la Nueva Evangelización.

Las familias y las parroquias deben convertirse en centros de catecismo y doctrina continua de la Sagrada Eucaristía para sus hijos. Foto: Gustavo Kralj / Gaudium Press

«La evangelización en la familia es una continuación del trabajo misionero, así que en preparación para el 150 aniversario de la evangelización en Tanzania el próximo año, cada uno de ustedes debe participar plenamente», exhortó el Cardenal Policarpo Pengo, Arzobispo de dar es Salaam. Esto permitirá que las celebraciones de los logros de los antecesores se conviertan en la celebración del éxito de la evangelización en el presente. «Sin la Sagrada Eucaristía no hay vida divina dentro de la familia», enfatizó.

Los prelados del país acordaron realizar un Simposio Eucarístico cada tres años, destinando la Diócesis de Zanzíbar como anfitriona del Simposio a celebrarse en junio de 2019. De igual manera, los Obispos decidieron que cada Diócesis consagre Capillas de Adoración Perpetua en todas las regiones y donde se pueda adorar al Santísimo Sacramento las 24 horas del día y establecer que todas las parroquias destinen un tiempo de Adoración Eucarística al menos una vez por semana en el cual puedan participar las familias.

Estas decisiones fueron tomadas «para iniciar la la devoción a la Sagrada Eucaristía en las familias» y promover la oración «por la estabilidad familiar, bendiciones y la evangelización», anunció el Card. Pengo. «La Iglesia debe comprometerse a promover a los niños y entrenarlos para ser buenos cristianos que conocen el significado de la Sagrada Eucaristía y que son capaces de reconocer el papel de la Sagrada Eucaristía en sus vidas. Las familias y las parroquias deben convertirse en centros de catecismo y doctrina continua de la Sagrada Eucaristía para sus hijos».

Con información de AMECEA.