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Pouso Alegre – Minas Gerais (Lunes, 20-11-2017, Gaudium Press) El Siervo de Dios Padre Alderigi Maria Torriani, sacerdote de la Arquidiócesis de Pouso Alegre, fallecido en 1977, tendrá la fase diocesana de su proceso de canonización concluida el próximo día 22 de diciembre. Para esta ocasión, habrá una Santa Misa en el Santuario de Santa Rita de Cássia, en Santa Rita de Caldas, lugar en el cual su cuerpo está enterrado.
Ahora, el proceso será encaminado a Roma, dando continuidad a toda la pesquisa y levantamiento de posibles milagros obtenidos por la intercesión del religioso.
Muchos fieles de Pouso Alegre acostumbran acordarse del Monseñor Alderigi como «un hombre de Dios, perseverante en la oración. Un hombre de la Iglesia totalmente dedicado al progreso espiritual de su pueblo. Un hombre que se hizo pobre para donarse enteramente a los pobres. Un regalo de Dios que pasó por este mundo haciendo el bien».
Sobre la vida y también cómo se encuentra el proceso de canonización, el Padre Rodrigo Carneiro Paiva Mendes, vice-postulador de la causa, en entrevista para el site de la Arquidiócesis de Pouso Alegre, afirmó que el Padre Alderigi Torriani murió en 1977 «con fama de santidad y, desde entonces, las personas reconocen que su vida fue un testimonio de fe, amor y esperanza».
«La Arquidiócesis, percibiendo el apelo popular, abrió en 1999, con la autorización de la Congregación para la Causa de los Santos, su proceso de canonización. El proceso se encuentra todavía en la primera fase, que es llamada de fase diocesana, donde una comisión de historia ha buscado, a través de pesquisas, conocer la vida del Padre Alderigi, y otra comisión ha recogido testimonios de personas que lo conocieron, para que se verifique y compruebe a través de testimonios su fama de santidad», explicó.
Según el Padre Rodrigo, «dentro del proceso de canonización existen funciones que precisan ser desempeñadas. La figura del postulador es de aquel que coordina los trabajos y busca divulgar la vida del Siervo de Dios. En el caso de este proceso, el postulador es el Padre Leandro de Carvalho Raimundo, hoy párroco de Monte Verde. Cuando de su estadía en Roma para estudios teológicos, realizó también estudios en la Congregación de la Causa de los Santos».
Todavía conforme el vice-postulador, «la vida del Padre Alderigi fue una vida muy simple, pero que se destacó por su fe y devoción a Nuestra Señora y Santa Rita. Un ser humano desapegado, que se preocupó mucho con cuestiones humanas, sociales y educativas, en la promoción de la persona. Promovió el ser humano, pues fue un hombre de fe y de oración».
Trabajar en este proceso ha sido edificador para el Padre Rodrigo, una vez que como sacerdote, él pudo conocer más la vida de otro religioso que trabajó en aquella región «esparciendo el cuidado de Cristo Buen Pastor».
«Algo que me impresiona es el cariño de un pueblo por su sacerdote, incluso habiendo fallecido hace 40 años, su memoria está muy viva. Algo impresionante también es la confianza de las personas en su intercesión. Consecuencia de esta confianza son las innúmeras gracias alcanzadas por su intermedio», contó.
Los próximos pasos, conforme el vice-postulador, después del cierre de la fase diocesana, será el inicio de la fase romana del proceso de canonización, en el cual «el postulador pasa a ser el Dr. Paolo Vilotta. Este nuevo postulador de la fase romana es un italiano que posee su equipo de trabajo y que es responsable en Brasil y en otros países por casi 100 procesos de canonización».
«En esta fase romana, será estudiado el material producido por la diócesis: históricos, testimonios y escritos del Siervo de Dios y con este estudio, analizando sus virtudes y también a lo largo de esta fase un posible milagro».
Por último, el Padre Rodrigo declaró percibir «que un paso importante es la divulgación del Padre Alderigi en Jacutinga, que es su ciudad natal».
«Es posible que la Iglesia reconozca oficialmente la santidad del Padre Alderigi, pues su vida es un verdadero testimonio del Evangelio. En relación al plazo, no puedo afirmar nada, pues eso dependerá de muchos factores. Lo importante en este momento es rezar por el buen éxito del proceso de canonización y buscar divulgar mucho al Siervo de Dios, para que sea conocido y más personas pidan a él el auxilio para sus vidas y, quien sabe, de esta divulgación salga el futuro milagro que la Iglesia precise para declararlo beato», concluyó el presbítero. (LMI)
De la redacción de Gaudium Press, con informaciones de la Arquidiócesis de Pouso Alegre
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