Shanghai (Martes, 19-12-2017, Gaudium Press) Con la notable ausencia del Obispo de Shanghai, Mons. Thaddeus Ma Daqin, quien continúa detenido en el Seminario de Sheshan, la Catedral de San Ignacio en Shanghai, China, reabrió sus puertas tras dos años de cierre por trabajos de restauración. La Eucaristía de dedicación del templo fue presidida por el Decano de la Diócesis y concelebrada por unos 50 sacerdotes el pasado 16 de diciembre, según informó la agencia noticiosa AsiaNews.
Catedral de San Ignacio en Shanghai, China. Foto: AsiaNews. |
La Catedral fue cerrada a causa de unas grietas en techo que evidenciaron un problema de filtración de aguas lluvias y que las autoridades clasificaron como un grave riesgo para los fieles. Durante dos años se realizaron las obras de reparación y los católicos locales creían que la apertura del templo sería la ocasión propicia para la liberación de Mons. Ma Daqin, quien no ha podido iniciar su ministerio episcopal desde su ordenación en junio de 2012.
La figura de Mons. Thaddeus Ma Daqin es representativa de los graves problemas de libertad religiosa para los católicos en China. A pesar de contar con el mandato papal para su ordenación episcopal y el visto bueno de las autoridades locales, Mons. Ma Daqin fue retenido por haber renunciado públicamente a sus cargos en la organización oficialista Asociación Patriótica, que controla la vida de la Iglesia de la llamada comunidad «oficial», reconocida por las autoridades.
El castigo al Obispo fue el ser despojado de todos los símbolos de su autoridad y ser recluido en el Seminario de Sheshan, donde no puede ejercer el gobierno de la Diócesis. Cuatro años después se difundió la noticia de su arrepentimiento y de su readmisión en la Asociación Patriótica, a la cual pertenecería como sacerdote y no como Obispo. Quienes esperaban verlo asumir el gobierno de la Iglesia local notaron su ausencia en la reciente ordenación de cuatro sacerdotes y en la dedicación de la Catedral. El prelado publicó un mensaje en su cuenta personal de Wechat (una red social china) en la que describió el clima de la colina de Sheshan, permitiendo inducir su ubicación y la permanencia de su retención.
La Catedral de San Ignacio presenta un estilo neo-gótico y es el templo más grande de Shanghai, con una capacidad de hasta 3 mil personas.Fue diseñada por un arquitecto británico y construida con recursos de empresarios franceses, siendo finalizada en 1910. El templo fue parcialmente destruido durante la llamada «revolución cultural» de 1966 y usada como depósito de frutas y verduras durante el período de más grave persecución religiosa en el país. En 1979 fue restituida a la Diócesis y restaurada durante las décadas de 1980 y 1990.
Con información de AsiaNews.
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