Roma (Miércoles, 20-12-2017, Gaudium Press) Roma es ciudad de encanto y de misterio. Allí, hace más de 200 años, en un pasadizo oculto, ocurrió un hecho prodigioso que dejó a muchos atónitos: Una imagen de la Virgen abrió los ojos como si se despertara de un sueño.
El suceso ocurrió el 9 de julio de 1796 muy cerca del Campo dei Fiori y Piazza Navona, lugares emblemáticos de la Ciudad Eterna, en un pasadizo histórico y muy antiguo, el «Pasetto del Biscione» -Pasadizo de la Serpiente-, que custodia la imagen de la «Madonna del Latte» -Virgen de la Leche- que data del año 700.
Aconteció que Nuestra Señora comenzó a abrir y cerrar los ojos, como pestañeando, mientras seguía con su mirada a los transeúntes que pasaban por el lugar, quienes muy pronto se congregaron en el pasadizo para admirar el prodigio que duró por un tiempo.
Pasetto del Biscione, donde hace más de 200 años ocurrió el suceso prodigioso de la Virgen de la Leche / Foto: rome.glocalizeyourself.com. |
Tanto así que muchos, con el deseo de ver personalmente lo que allí ocurría, y también movidos por la fe a la Virgen, comenzaron a peregrinar al lugar, que era casi como un laberinto, ya que era necesario pasar por las estrechas calles de la Roma de entonces, hasta encontrar el pasadizo de la Virgen de la Leche.
Una vez la imagen dejó de parpadear y cerró de manera definitiva sus ojos, fue trasladada en procesión hasta la Iglesia de San Carlo ai Cantenari, donde se halla en la actualidad. En su lugar, con el paso del tiempo, se han ubicado diversas imágenes de Nuestra Señora, que tristemente fueron destruidas por diversos actos vandálicos.
La imagen de Nuestra Señora pertenecía antes a la Iglesia que hoy recibe el nombre de Santa María en Grottapinta, que antiguamente era un templo dedicado a Venus. La Iglesia fue mandada a construir por los Orsini, familia noble italiana, quienes ubicaron la preciosa imagen de la «Madonna del Latte», que tiempo después fue trasladada al famoso pasadizo Pasetto del Biscione.
Pese al hecho milagroso ocurrido allí, con el paso de los años el famoso pasaje romano quedó en el olvido, llegando incluso a la ruina. Pero en 2014 ganó un nuevo esplendor gracias a la intervención del Centro de Estudios de la Capilla Orsini, centro cultural, escuela de artes y de investigación antropológica, que llevó a cabo un trabajo de restauración para retornarle la vida al pequeño pasadizo de la Virgen.
El trabajo de restauración, adelantado por 6 personas, tardó dos años, culminando recientemente con un hermoso pasadizo que hoy cuenta con un colorido fresco sobre su bóveda, y la presencia maternal de la Virgen María.
En la actualidad, donde se hallaba Nuestra Señora de la Leche, fue ubicada una representación de la Virgen de la Providencia de Scipione Pulzone da Gaeta, hoy venerada por los transeúntes que se asoman por antiguo pasadizo de la Ciudad Eterna.
Con información de Aleteia.
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