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Valencia (Martes, 26-12-2017, Gaudium Press) Una Navidad especial es la que han celebrado los sacerdotes jubilados y enfermos de la Archidiócesis de Valencia, con la visita que realizó el Arzobispo, Cardenal Antonio Cañizares, a la residencia sacerdotal de las religiosas Cooperadoras de Betania durante la Nochebuena, el 24 de diciembre.
Acompañando a los presbíteros, el purpurado celebró a las 19:30 horas la santa Misa en la capilla de la residencia, y posteriormente compartió con ellos la cena de Nochebuena. Al concluir el Cardenal Cañizares se reunió con las hermanas Cooperadoras de Betania, que atienden a los sacerdotes ancianos y enfermos de la jurisdicción eclesial española, y luego se dirigió a la Catedral valenciana para presidir la tradicional misa de Gallo de la noche de Navidad.
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| El Cardenal Cañizares durante la celebración Eucarística en la residencia de Cooperadoras de Betania / Foto: AVAN. |
La residencia de las Cooperadoras de Betania hace parte del servicio de atención a sacerdotes enfermos y jubilados que depende directamente del Cardenal, con el apoyo del sacerdote encargado, el Padre Miguel Cerdá, quien es además el capellán de la residencia. A través de este servicio los sacerdotes que son adultos mayores, o han cesado sus actividades por enfermedad, reciben atención en su salud, y también a nivel espiritual.
Las Cooperadoras de Betania, congregación que fue fundada en 1925 por el Padre Pedro García Cerdán, está dedicad a la atención de los sacerdotes, asistiéndoles en lo personal, así como en catequesis, en el desarrollo de su ministerio pastoral y en Liturgia. También colaboran con los presbíteros activos, brindándoles hospedaje, y cuidados a los jubilados y enfermos.
Saludo de Navidad del Cardenal Cañizares
A través de un video difundido por las redes sociales, el Cardenal Antonio Cañizares ha brindado un saludo de Navidad en el que recuerda que «Jesús, el Hijo de Dios, por amor a los hombres se encarnó en María, Virgen y Madre, se hizo niño», para manifestar «la gloria del cielo».
«El salvador de los hombres, luz de los pueblos y alegría de los sencillos, revela su poder y la fragilidad de un niño, y demuestra que es siempre más grande mediante el hecho de que se hace más pequeño», agrega.
El purpurado dice que ojalá Dios, «nos concediese a todos, en esta Navidad, descubrir esto y entrar dentro de su espacio».
«Que el Señor nos permita asombrarnos con la maravilla que acontece en el hecho de que el hijo de Dios, al hacerse hombre, se ha hecho un pequeño niño. Ahí descubrimos al Dios con nosotros, Dios con los hombres y para los hombres», prosigue.
En este sentido, el Arzobispo de Valencia reflexiona que si se conociese el don de Dios que se hace desde el acontecimiento de la Encarnación, el Nacimiento en Belén y en los primeros años de Nazaret, y se percata el amor que Dios da desde estos acontecimientos, «no cabría en el mundo sino el amor de los hombres».
«Ojalá aprendamos este camino del amor en la escuela de Belén y Nazaret donde vemos a Jesús como niño», indica el purpurado en el mensaje.
Finalmente, el Cardenal Cañizares afirma: «únicamente desde el amor, un amor infinito; el amor de Dios, puede comprenderse este hecho que cambia al mundo, que trae la verdadera revolución al mundo».
Con información de AVAN.
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