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Valencia (Martes, 09-01-2018, Gaudium Press) Una fiesta singular es la que ha vivido el lunes 8 de enero la localidad valenciana de Ayora con la celebración al Santo Ángel Tutelar de la Villa, tradición que cuenta ya con más de 600 años de historia.
El epicentro de la celebración estuvo enmarcado por una Misa que ocurrió a las 11:30 horas en la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción; y una romería hasta la ermita del Santo Ángel, que contó con la participación de un sinnúmero de fieles.
Se trató de la tradicional peregrinación con la imagen del Santo Ángel Tutela de Ayora, que se venera en el templo parroquial. El recorrido inició en la iglesia y culminó nuevamente en la ermita, recordando así la rogativa del pueblo al santo ocurrida desde 1392.
Previo a las conmemoraciones, el domingo 7 de enero, se realizó en la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción el tradicional volteo de campanas y el encendido de la hoguera en la plaza de la Fuente con ocasión de la víspera de los homenajes al Ángel de la Villa.
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| Hace 626 años un ángel se le apareció a una anciana en las afueras de Ayora pidiéndole una rogativa para que cesara la peste / Foto: AVAN. |
Un Ángel se le apareció a una anciana
De acuerdo con la tradición, el segundo lunes de enero de 1392 un ángel se le apareció a una anciana a las afueras de la localidad valenciana de Ayora pidiéndole convocar a toda la población en rogativa para evitar el hambre y la peste.
Una narración histórica, de autoría de Miguel Molsós, cuenta los hechos acontecidos hace 626 años de la siguiente manera:
«Se encontraba la Villa de Ayora sometida a la peste y el hambre en el año 1392. En la mañana del segundo lunes de enero de 1392, una mujer de nombre Liñana tomaba el camino a Jarafuel que distaba de Ayora dos leguas. En el camino se encontró con un bello mancebo que le dijo: ‘Vuelve a Ayora y di que vengan a este lugar y hagan una rogativa todos los años y la peste y el hambre que asolan Ayora desaparecerá’. La mujer le contesto que no la creerían, que qué podía hacer ella que solo era una mujer. En ese momento el mancebo tomó su mano y le escribió en la palma unos caracteres y desapareció. La mujer volvió a Ayora y se lo contó a Clérigos y Jurados y la creyeron. El pueblo fue en procesión al lugar indicado donde hicieron la rogativa y al momento cesó la peste y el hambre en Ayora».
Desde entonces, y pasados ya seis siglos, la población de la localidad valenciana se ha mantenido fiel a la promesa y cada segundo lunes de enero sale en peregrinación, con la imagen del Santo Ángel, hasta el lugar donde ocurrió el suceso prodigioso. Allí se edificó una ermita que recuerda la milagrosa presencia del Ángel, y tiene lugar la rogativa.
La fiesta del Santo Ángel Tutelar es la más importante de Ayora, tanto así que es uno de sus signos más distintivos. En junio de 2017 la celebración fue declarada por la ‘Comunitat’ Valenciana Fiesta de Interés Turístico Local.
Con información de AVAN.
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