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Redacción (Lunes, 12-03-2018, Gaudium Press) La Coordinadora de Asociaciones de Laicos Misioneros de España (CALM) puso recientemente en marcha la campaña «Cambia de rollo, da un paso más», con el objeto de dar a conocer la labor que desarrollan con los laicos que tienen inquietud misionera, y se despliega brindándoles acompañamiento tanto en la preparación previa al destino de misión, en el lugar de la misión y en la acogida al finalizar su compromiso misionero, que suele ser de dos años.
La CALM, que es de ámbito nacional, está conformada por diferentes asociaciones apostólicas y grupos diocesanos de laicos comprometidos que tienen entre sus objetivos la promoción de la misión ‘Ad Gentes’ de los laicos en territorios y ámbitos misioneros.
«En nuestras asociaciones trabajamos con estilos y carismas diferentes, pero entendemos que la misión es responsabilidad de toda la Iglesia», expone la Coordinadora de Asociaciones de Laicos Misioneros en su sitio web.
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| «Todos los laicos son misioneros en virtud del bautismo»: San Juan Pablo II / Foto: Rebek por Cathopic. |
Por esta razón, su labor se realiza a través de un trabajo en red en el cual se comparten ilusiones, sinergias y necesidades comunes. «De esta manera, entre todos y todas, colaboramos para darles respuesta», señala.
La finalidad de la Coordinadora es la de ser lugar de comunicación, encuentro, diálogo, así como de conocimiento mutuo de las asociaciones laicales; coordinando a la vez los compromisos y esfuerzos que favorezcan su presencia en el ámbito misionero de la Iglesia Universal, siendo «testigos de la fe y caridad».
Entre sus objetivos, además de promover la vocación laical misionera, está animar la reflexión sobre la condición de los laicos misioneros como anunciadores del Evangelio; la elaboración de propuestas conjuntas de formación para que el laicado se prepare a la misión; así como el planteamiento de soluciones para diferentes problemas sociales, económicos y de atención sanitaria del laicado misionero durante la misión.
La CALM, que fue fundada en mayo de 2003, hace parte de varias realidades misioneras, entre ellas la Obra Misional Pontificia (OMP), por medio del Consejo Nacional de Misiones; de la Pontificia Unión Misional (PUM) y de la Escuela de Formación Misionera San Pío X; siendo además reconocida dentro de la Comisión Episcopal de Misiones.
«La Labor evangelizadora de los laicos está cambiando la vida eclesial»
San Juan Pablo II, en la Encíclica ‘Redemptoris missio’, sobre la permanente validez del mandato misionero, se refiere ampliamente a la importante labor de los laicos en la actividad misionera: «La Labor evangelizadora de los laicos está cambiando la vida eclesial; las Iglesias particulares se muestran abiertas al encuentro, al diálogo y la colaboración (…) Sobre todo, se está afianzando una conciencia nueva: la misión atañe a todos los cristianos, a todas las diócesis y parroquias, a las instituciones y asociaciones eclesiales».
Recuerda que «todos los laicos son misioneros en virtud del bautismo»; algo que quedó confirmado en el Concilio Vaticano II que pone de relieve «el carácter misionero de todo el Pueblo de Dios, concretamente el apostolado de los laicos y subrayando la contribución específica que estos están llamados a dar en la actividad misionera».
«Todos los fieles laicos deben dedicar a la Iglesia parte de su tiempo, viviendo la coherencia de su propia fe», señala San Juan Pablo II en la encíclica.
Con información de Diócesis de Salamanca y laicosmisioneros.org.
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