El rechazo al maligno y la profesión de fe se unen en el bautismo, dijo el Papa en la Audiencia General

Ciudad del Vaticano (Miércoles, 02-05-2018, Gaudium Press) En la catequesis de la Audiencia General, en la Plaza de San Pedro, el Pontífice analizó tres ritos del sacramento del bautismo: la bendición del agua, la renuncia al pecado y la profesión de fe.

«Los invito a que hagan memoria agradecida de su bautismo, y a que renueven con alegría y convencimiento el compromiso que sellaron aquel día, de modo que vivan siempre inmersos en el amor de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo», introdujo el Papa, quien continuó hablando del simbolismo del agua, presente también en las Sagradas Escrituras.

«El agua es fuente de vida y de bienestar, mientras su ausencia provoca el extinguirse de la fecundidad, como sucede en el desierto; pero el agua puede ser también causa de muerte, cuando sumerge entre sus caudales cualquier cosa; finalmente, el agua también tiene la capacidad de lavar, limpiar, purificar».

Con el Bautismo nos sepultamos con Cristo en su muerte y resucitamos con Él para la vida inmortal

«El agua es un elemento que se caracteriza por su capacidad de vivificar y de purificar este simbolismo natural aparece en varios pasajes de la Palabra de Dios, que son recordados al bendecir el agua que se usará para el bautismo, a la vez que se invoca sobre ella la fuerza del Espíritu Santo, para que todos los que reciban el bautismo sean sepultados con Cristo en su muerte y con él renazcan a una vida inmortal».

Seguidamente Francisco explicó la relación entre la renuncia a satanás y la profesión de fe que se realiza en el Bautismo:

«En la medida en la cual digo ‘no’ a las sugestiones del diablo – aquel que divide, dijo el Papa – estoy en grado de decir ‘si’ a Dios que me llama a conformarme a Él en los pensamientos y en las obras. No es posible adherir a Cristo poniendo condiciones. Es necesario despojarse de ciertas ataduras para poder abrazar de verdad a los demás. Es necesario cortar puentes, dejándolos a las espaldas, para retomar la nueva Vida que es Cristo».

Profesión de fe

Así como la renuncia al maligno es formulada en primera persona (- «¿Renuncias a Satanás, a todas sus obras, y a todas sus seducciones?» – «Renuncio») , así la profesión de fe «Creo». «Es una elección responsable, que debe ser traducida en gestos concretos de confianza en Dios. El acto de fe -dijo el Pontífice- supone un empeño que el mismo Bautismo ayudará a mantener con perseverancia en las diversas situaciones y pruebas de la vida».

El Papa Francisco invitó a los fieles a hacer memoria de su bautismo y a renovar con alegría el compromiso sellado con Dios en ese feliz día.

Con información de Vatican News.