Toronto (Sábado, 05-05-2018, Gaudium Press) El Obispo Stephen Chmilar, quién dirige la Eparquía Católica Ucraniana de Toronto y el Este de Canadá, emitió una declaración en la cual rechazó la implementación de una declaración proaborto en los requisitos del acceso a fondos estatales para empleos de verano y pidió a los grupos católicos bajo su autoridad que hayan firmado esta declaración retractarse de la misma.
Mons. Stephen Chmilar. Foto: Eparquía Católica Ucraniana de Toronto y el Este de Canadá. |
«Como mis hermanos Obispos, estoy profundamente entristecido por la discriminación que nuestra Iglesia está enfrentando a la luz de los nuevos requerimientos ideológicos como requisito de elegibilidad que ha sido insertado en este programa», expuso el prelado, quien aplaudió a las organizaciones que se han declarado oficialmente en contra del requisito y han señalado que constituye una vulneración de los derechos de conciencia y un acto de discriminación por parte del gobierno.
Mons. Chmilar calificó como «no aceptable» el hecho de que la aplicación al programa de trabajos de verano obligue a las organizaciones que aplican a afirmar un respeto de los «Derechos Humanos individuales» que incluyen los «derechos reproductivos» y por tanto el llamado derecho al aborto. «La jerarquía de la Iglesia Católica Ucraniana de Canadá, a través de nuestra membresía en la Conferencia Canadiense de Obispos Católicos, es uno de los 90 grupos religiosos, tanto cristianos como no cristianos, que han firmado una objeción a esos requerimientos», anunció el prelado, quien adjuntó a su declaración una copia de esta carta de rechazo. El prelado invocó la historia de la Iglesia Greco Católica Ucraniana y la persecución que ha padecido como ejemplo para los creyentes canadienses.
«A través de la historia de Ucrania, incluyendo la guerra que continúa en Ucrania, la Iglesia Católica Ucraniana juega un papel crítico en la lucha por la libertad y la soberanía. Al luchar por sus creencias y por la libertad de culto, nuestro clero y fieles fueron forzados a ser subterráneos, fueron apresados, exiliados y ejecutados por su ministerio con el pueblo ucraniano. Nuestros fieles deben estar alerta sobre la importancia del derecho humano básico a disentir y de tener libertad de pensamiento de acuerdo a la propia conciencia y a la creencia religiosa», comentó el Obispo. «Es la responsabilidad de todos interponerse a cualquier discriminación sistemática por parte del gobierno en una sociedad democrática. Este es un principio que los ucranianos ciertamente comprenden íntimamente».
El prelado manifestó su deseo de que la comunidad ucraniana manifieste su solidaridad con todos los canadienses y su derecho a ser libres de la coerción gubernamental sobre sus creencias. «Cualquier organización que haya radicado una aplicación por un aporte es urgido a retractarse de esta aplicación y devolver cualquier dinero recibido explicando que la organización no apoya el derecho al aborto», concluyó el prelado, quien invocó finalmente la protección de la Santísima Madre de Dios.
Con información de Eparquia Ucraniana Católica de Toronto y Servicio de Información Religiosa de Ucrania.
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