Madrid (Lunes, 21-05-2018, Gaudium Press) Con el lema «Discípulos misioneros de Cristo, Iglesia en el mundo», se celebró en España el Día de la Acción Católica y el Apostolado Seglar. La iniciativa, impulsada por la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar de la Conferencia Episcopal Española (CEE), ocurrió el domingo 20 de mayo, en la solemnidad de Pentecostés.
Con ocasión de la jornada, los obispos españoles dirigieron un mensaje en el que invitaron a tomar conciencia del papel fundamental que el laicado juega dentro de la Iglesia en una nueva etapa de la evangelización.
«Los laicos están llamados a ser Iglesia en el mundo porque su apostolado tiene su origen en el bautismo. Por el sacramento del bautismo, cada fiel laico se convierte en discípulo misionero de Cristo, en sal de la tierra y luz del mundo», indican los prelados.
En la misiva, los obispos también se refieren a los elementos que identifican a un discípulo misionero de Cristo, en relación con el tema de la jornada:
Cartel de la jornada / Foto: CEE. |
«Ser discípulos misioneros de Cristo significa poner al Señor en el centro de tu propia existencia. El discípulo de Cristo se nutre de la oración, la escucha de la Palabra y los sacramentos, especialmente de la eucaristía. Ser discípulos misioneros de Cristo se vive en el amor y la fidelidad a la Iglesia, fundada por el mismo Cristo para nuestra salvación. Ser discípulos misioneros de Cristo consiste en estar atentos a las necesidades de nuestros hermanos, especialmente de los pobres y los excluidos y convertirnos para ellos en oasis de misericordia (…) Ser discípulos misioneros de Cristo significa encarnar la vocación al Amor a la que estamos llamados, especialmente en lo cotidiano (…) sabiendo acoger y aprender de todos. Ser discípulos misioneros de Cristo pide el compromiso en el cuidado y respeto de la creación».
En otro momento, los prelados elevan una acción de gracias al Espíritu Santo por la diversidad de carismas laicales que ha dado a la Iglesia en España, orando para que «todos sirvan para el bien común, para la edificación de la propia Iglesia».
Asimismo, hacen un llamado para que se escuche a los jóvenes y «dejar que asuman el protagonismo en la tarea de la evangelización, en comunión con los adultos, con las familias», de cara al Sínodo de los Jóvenes que ocurrirá en Roma el próximo octubre.
«Prestamos un especial interés en esta Jornada de Acción Católica y del Apostolado Seglar a los jóvenes, con el deseo de que ‘reconozcan y acojan la llamada al amor y a la vida en plenitud, y también pedir a los mismos jóvenes que ayuden a identificar las modalidades más eficaces de hoy para anunciar la Buena Noticia. A través de los jóvenes, la Iglesia podrá percibir la voz del Señor que resuena también hoy'», agregan citando el documento preparatorio para el Sínodo.
Concluyen la misiva orando a la Virgen María para que «interceda por nuestro laicado para que promueva en nuestra Iglesia española un nuevo, y tan necesario, Pentecostés».
Con información de la Conferencia Episcopal Española.
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