Ciudad del Vaticano (Viernes, 15-06-2018, Gaudium Press) El Papa Francisco recibió en la mañana de este miércoles 13 de junio a la Guardia de Nuestra Señora de Nazaret, venida de la ciudad de Belén, en el Estado de Pará, Brasil.
El grupo, que tiene la misión de cuidar de la Berlinda de la Virgen Santísima, entregó al Pontífice un libro hecho por la fotógrafa Soraya Montanheiro, que cuenta sobre la mayor expresión de fe mariana del mundo, el Cirio de Nazaret.
Junto con la obra, la guardia también obsequió al Papa un pequeño pedazo de la tradicional cuerda usada en el Cirio anterior, representando los «promeseros».
El libro tiene la finalidad de narrar un poco la historia del Cirio de Nazaret y del grupo que lo acompaña y realiza actividades de caridad y apoyo religioso antes y después de los mayores eventos religiosos.
Foto: Vatican News. |
Renato Neves, miembro de la guardia de Belén, describió al site Vatican News cómo fue el encuentro de los brasileños con el Papa:
«Nosotros fuimos allá y tuvimos una emoción muy grande. No tenemos muchas palabras para definir lo que sentimos. Nuestra misión hoy, en la guardia, fue de intentar mostrar un poquito más de la historia de la guardia al Papa, de Nuestra Señora de Nazaret, y un poquito más sobre el Cirio y lo que ocurre, cuál sería nuestro trabajo en el año».
Para Renato, «estar presente junto al Papa, conseguir ese contacto próximo con él, fue muy emocionante».
«Yo creo que eso es una cosa imposible, inigualable. Cuando él viene aproximándose, cuando estamos en el mismo ambiente que él, nosotros sentimos algo diferente, una tranquilidad. Pero cuando él llega más próximo de la gente, nuestro corazón comienza a latir más fuerte, la tranquilidad aumenta. Fue una cosa que nosotros no conseguimos describir y viviremos eso muchos y muchos años de nuestras vidas», declaró.
Creada en 1974, la Guardia de Nuestra Señora de Nazaret auxilia en la organización de las procesiones. El grupo consiste en casi 2 mil hombres laicos, que tienen como objetivo también realizar caridades junto a los padres Barnabitas.
Además de eso, la guardia supervisa la plaza del Santuario durante la festividad nazarena y en otras solemnidades ocurridas durante el año, velando por la disciplina y respeto en relación a la utilización del espacio, más precisamente del Altar-Santuario. (LMI)
De la redacción Gaudium Press, con información de Vatican News.
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