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Dublín (Viernes, 15-06-2018,Gaudium Press) Los hospitales católicos recibieron una fuerte advertencia por parte del Primer Ministro de Irlanda, Leo Varadkar, quien afirmó que todas las instituciones de salud – incluyendo las de inspiración religiosa – estarían obligadas a practicar abortos cuando entren en vigor nuevas legislaciones proyectadas por el gobierno tras el referendo que retiró la octava enmienda que contenía la protección constitucional a la vida naciente. Esta posición es contraria a la expresada por los Obispos en su mensaje tras la publicación de los resultados del referendo y podría representar incluso una amenaza de cierres para los hospitales católicos.
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| Los Obispos de Irlanda destacaron la importancia de la defensa de la vida y la objeción de conciencia. Foto: Conferencia de Obispos de Irlanda. |
«Para los profesionales de la salud el derecho de la objeción de conciencia debe ser respetado. Sería una gran injusticia requerir que los doctores y enfermeras participaran, incluso a través de una referencia, en la provisión de servicios que podrían constituir una seria violación de su conciencia», afirmaron los Obispos en un mensaje en el cual anunciaron la creación de un nuevo Consejo para la Vida con el fin de trabajar en la promoción del respeto a la vida humana bajo las nuevas condiciones del país. La comprensión de que la objeción de conciencia abarca también a cargos administrativos y personas que deben autorizar los procedimientos para hacerlos posibles es precisamente el aspecto no reconocido por el Primer Ministro en su anuncio.
Según el mandatario, en las legislaciones proyectadas para reglamentar el aborto los doctores y otros profesionales médicos estarían amparados personalmente en su negativa a participar en los abortos, pero las instituciones como hospitales y clínicas estarían obligados a ofrecerlo. «Hospitales como, por ejemplo, el Holles Street, que es un hospital de inspiración católica, el Mater, el San Vicente y otros, estarán obligados a realizar, y se esperará que realicen, cualquier procedimiento que sea legal en este país y ese es el modelo que seguiremos», declaró el Primer Ministro a los medios de comunicación, según reportó Infocatólica.
Estas afirmaciones representan una amenaza a las instituciones católicas que verían seriamente comprometida su identidad católica al ser obligadas a realizar este tipo de procedimientos. «La legislación violenta la voluntad de los fundadores de los hospitales católicos y sus cuerpos de gobierno. Fuerza a los miembros de los cuerpos de gobierno a cooperar con el aborto, algo que ningún católico podría hacer», denunció el Editor consultor de The Catholic Herald, P. Alexander Lucie-Smith. «Dado que solamente habría un resultado posible – el cierre de todos los hospitales católicos – es posible que la idea del Sr. Varadkar sea expulsar a la Iglesia de la provisión médica pública. Uno esperaría que los miembros del Dail verían esto por cuanto es en realidad y lo pensarían de nuevo».
Con información de The Catholic Herald, Infocatólica y Conferencia de Obispos de Irlanda.
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