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Bogotá (Lunes, 25-06-2018, Gaudium Press) En un mes en el cual se ha puesto de relieve el debate en Latinoamérica en torno al aborto, motivado por la iniciativa legal que busca su aprobación en Argentina, el sacerdote domínico colombiano Fray Nelson Medina expresó que el crimen del aborto tiene todas las características propias del obrar del maligno y que la lucha en favor del derecho a la vida puede equipararse en cierta medida con el exorcismo.
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| Fray Nelson Medina. Foto: Homilías y Catequesis Católicas |
«Por favor, entiendan todos: la lucha contra el aborto es más un exorcismo que otra cosa, y su escala global, y la certeza que tiene el demonio de que esas presas ya son suyas, explica bien la violencia de insultos con que nos atacan», indicó el sacerdote, quién explicó a través de su cuenta de Twitter varios argumentos para sostener esta hipótesis.
Uno de las publicaciones del sacerdote compara las características del delito con las particularidades de las acciones demoníacas. «Rasgos del obrar del demonio: maldad premeditada; negación obstinada de la verdad; codicia inagotable; crueldad máxima; búsqueda de daño irreversible y permanente; ataque al inocente; odio hacia Dios y hacia el hombre su imagen; cinismo y frivolidad: todos se dan en el aborto», expresó.
El presbítero también indicó como señales las expresiones de violencia y los ataques a templos católicos y a creyentes registrados en países como Argentina y capturados en diferentes fotografías y vídeos que han generado gran preocupación entre la población católica latinoamericana. Fray Nelson Medina propuso que, con la labor de promoción de la vida, «estamos obligando a la serpiente a que muestre su horrenda faz, a que escupa su veneno, a que deje de esconderse con esa cara de ‘somos razonables y tolerantes'».
El sacerdote además recordó que los eslóganes con los cuales se defiende la promoción del aborto en realidad no apelan a la razón. «Las estadísticas no las ayudan, la ciencia las contradice, el corazón se revuelca de asco ante tal crimen… sólo les queda el poder de las tinieblas y por eso multiplican blasfemias, cinismo y agresividad de posesas».
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