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Managua (Lunes, 09-07-2018, Gaudium Press) Fuertes declaraciones hizo Mons. Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, ayer, en la iglesia San Francisco de Asís de la capital nicaragüense. Afirmó el prelado que los obispos del país centroamericano meditarán en las próximas horas, si es justificable permanecer en la mesa de diálogo nacional, de la cual la Iglesia participa como mediadora por petición del propio presidente del país.
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| Mons. Silvio Báez |
Los ataques reiterados y continuos a la población civil por parte de una combinación de fuerzas armadas gubernamentales y paramilitares «ha hecho que los obispos pensemos en valorar realmente si continuar o no en el diálogo nacional», expresó Mons. Báez. «El diálogo requiere de ciertas condiciones. Sobre todo actuar con la verdad, detener la represión, aceptar las propias responsabilidades, no tergiversar la realidad, no hacer pasar por víctimas a quienes son los agresores; es decir, tenemos que construir el diálogo sobre la verdad. Si no, es inútil que estemos ahí, sentados alrededor de una mesa, mientras el pueblo sigue muriendo», enfatizó. Diversas fuentes aseguran que los muertos sobrepasan los 300 desde que se iniciaron las protestas populares en abril.
Presidente nicaragüense ataca veladamente a la Iglesia
Ayer, en el acto sandinista «Caminata por la paz y la seguridad», el presidente Daniel Ortega habló contra algunas «instituciones religiosas», en alusión que muchos consideraron era dirigida a la Iglesia Católica. «Se ha creado un ambiente de hostilidad hacia la Iglesia Católica», expresó el Obispo auxiliar de Managua. «La Iglesia Católica seguirá adelante, no tiene miedo».
«Hay que preguntarse ya -continuó Mons. Báez-, si este camino [de un diálogo sincero] el gobierno está dispuesto a seguirlo recorriendo. Que él fue el que pidió el diálogo. Entonces, que ahora diga verdaderamente, si quiere dialogar sobre lo que desde el inicio dijimos que se iba a dialogar, que era la justicia frente a tantos asesinatos, de las masacres cometidas y la democratización del país».
Continúa la represión sangrienta
En el día ayer continuó la cruel represión por parte de fuerzas gubernamentales y paramilitares, con saldo de casi una decena de víctimas mortales y alrededor de 200 secuestrados, particularmente en Jinotepe y Diriamba, municipalidades del departamento de Carazo. Hace pocas horas, en la madrugada de este lunes, paramilitares atacaron la Basílica San Sebastián en Diriamba, rompiendo vidrios de la Basílica, con personas refugiadas adentro. (SCM)
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