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Santiago (Martes, 13-10-2009, Gaudium Press) El domingo 11, el Vicario para la Familia de la Arquidiócesis de Santiago, padre Marek Burzawa msf, dio término con una eucaristía a la Semana de la Familia, celebrada por la Iglesia chilena en sus distintas diócesis. El oficio religioso se efectuó en el Santuario de Lourdes y contó con la participación de numerosos fieles y matrimonios, quienes durante la primera semana de octubre estuvieron presentes en las distintas actividades que organizó la vicaría.
En su homilía, el padre Burzawa reconoció que la obediencia de los mandamientos y el amor a Dios, constituyen los elementos esenciales que ayudan a las familias a superar sus dificultades. Además afirmó que «el plan del Señor para el ser humano es que viva en familia, porque fuimos creados por amor y para el amor. Ahí está nuestra vocación: amar y ser amados. Dios nos creó a su imagen y semejanza, y Él no es un Dios de soledad sino de comunidad, un Dios de familia».
Al concluir su prédica instó a los fieles a seguir el plan de Dios y a ubicar a Jesucristo en el centro de la vida familiar, para que «cada hogar sea un lugar donde podamos encontrarnos con nosotros mismos, con lo demás y con el Señor». Luego invitó a los fieles a orar por las familias de Chile, «para que cada una de ellas sea un lugar de encuentro con el Señor y sus miembros vivan el plan que Dios les ha trazado».
Antes de la bendición final, el celebrante llamó a los matrimonios presentes al altar para renovar sus promesas matrimoniales. Luego del signo, el Vicario felicitó a cada uno de los cónyuges y los exhortó a «seguir siendo modelo de paciencia, compromiso, fidelidad y -sobre todo- de amor tanto para sus familias como para el resto de la comunidad».
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