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Las Cruces (Martes, 17-07-2018, Gaudium Press) La Diócesis de Las Cruces, Estados Unidos, continúa el proceso de investigación realizado a una escultura en bronce de la Santísima Virgen María bajo la advocación de Nuestra Señora de Guadalupe que registró en varias oportunidades una posible lacrimación (ver noticia anterior). A los testimonios de conversión y de beneficio espiritual se suman los reportes de los fieles presentes en el momento de las lacrimaciones y ahora los hallazgos de los análisis químicos practicados al líquido obtenido de la imagen.
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| Mons. Oscar Cantú, Obispo de Las Cruces, Estados Unidos. Foto: Diócesis de Las Cruces. |
«Hemos determinado que se trataba de aceite de oliva, un aceite de oliva con esencia», declaró Mons. Oscar Cantú, Obispo de Las Cruces, según informó Crux. «Algunos de los testigos afirmaron que olía a rosas, así que se trata de algo similar al aceite que yo bendigo y consagro cada año y que empleamos para el Bautismo, la Confirmación y la Ordenación de los sacerdotes».
El hecho de haber reconocido satisfactoriamente la sustancia que se encontraban en la imagen y que parece ser similar al Santo Crisma no significa que se haya descartado la posibilidad de un hecho milagroso. Una siguiente fase de la investigación intentará determinar si existió alguna causa natural para que el líquido pudiera encontrarse en la escultura de bronce. «Examinamos el interior de la estatua hueca. No hay nada en el interior que no deba estar ahí, excepto por telarañas, así que tomamos fotos y lo examinamos».
El fabricante de la escultura ya había afirmado que no encontraba ninguna explicación natural al hecho reportado y que ninguna de las otras esculturas que ha realizado tanto para uso religioso como para uso civil ha presentado algún fenómeno similar al de la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe de la diócesis de Las Cruces.
Monseñor Cantú destacó que todavía no se haya encontrado una explicación natural para el hecho y que existan una serie de testimonios sobre beneficios espirituales reportados por los devotos. «He leído la mayoría de estos testimonios escritos y son historias de tremenda fe de personas que han estado soportando un terrible sufrimiento en sus vidas y que han recibido una un tremendo consuelo espiritual por el hecho de que María camine con nosotros en nuestras lágrimas», indicó el prelado.
El Obispo ejercerá la guía de la diócesis hasta el mes de septiembre, cuando se espera asuma su nuevo nombramiento como Obispo coadjutor de San José, California. El prelado continuará la investigación hasta que deje su cargo y ha programado una visita al lugar de los hechos para observar la estatua con sus propios ojos.
Con información de Crux.
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