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Washington (Miércoles, 01-08-2018, Gaudium Press) El Director Ejecutivo del Morningside Institute, Nathaniel Peters, redactó un artículo para la revista Public Discourse del Witherspoon Institute de Estados Unidos. El Doctor en Teología afirmó que esta ciencia dedicada al estudio de Dios será la que dé forma al futuro de la Iglesia y no la política. Sus palabras buscan que los medios de comunicación hagan un análisis más elevado de la realidad de la Iglesia que trascienda las interpretaciones partidistas.
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| Pintura en los Museos Vaticanos que representa la doctrina de Santo Tomás de Aquino derrotando los errores del pensamiento pagano. Foto: Fr. Lawrence Lew, O.P. |
El académico recordó que años atrás un grupo de profesores y estudiantes de Teología redactaron una carta abierta de protesta para pedir a un diario norteamericano una cobertura de la información católica que no fuera sometida a una narrativa partidista. El intento de los firmantes era desautorizar a un columnista que más adelante transformó sus argumentos en un libro que examina el pontificado del Papa Francisco desde esta perspectiva.
«La Iglesia Católica es una institución humana y todas las instituciones humanas tienen sus políticas», comentó el redactor. «Sin embargo, la Iglesia Católica también es una institución teológica, una cuyos argumentos no simplemente sirven como apoderados para políticos liberales o conservadores». Por este motivo sugirió que el autor del libro y sus colegas deberían ver la Iglesia a través de «un lente más robusto» que tenga en cuenta la Teología.
El autor recordó que numerosas controversias teológicas en la historia de la Iglesia también han tenido una mezcla de política, en la cual reyes y emperadores intentaron promover o presionar a diferentes sectores. «En muchos casos hubiera sido difícil predecir qué ideas hubieran emergido como ortodoxas mirando la política», afirmó Peters, quién afirmó que incluso en algunas oportunidades los proponentes de ideas contrarias a la fe parecieron tener éxito durante décadas. Un caso histórico es el de los iconoclastas, quienes a pesar de haber tenido un éxito temporal en la promoción de sus ideas no pudieron imponerlas definitivamente a la Iglesia.
La fe católica superó esas dificultades porque se llegó a «un mejor entendimiento del Misterio de Cristo, cuya humanidad y divinidad debe ser mantenidas juntas si la Cruz y la Resurrección nos ofrecen la salvación. Rechazamos las creencias de los oponentes porque su lógica hubiera hecho que la Muerte y la Resurrección de Cristo no tuviera sentido. Al final, la lógica de la Encarnación, de la Cruz y la Resurrección determinó el resultado de los debates teológicos, más que la actuación política que los acompañó».
Esta solución teológica de las controversias en la historia de la Iglesia fue respaldada en otros ejemplos, como los debates entre los jansenistas y los jesuitas. Para el autor, el razonamiento teológico tiene una mayor permanencia en la vida de la Iglesia y las controversias temporales ceden eventualmente el lugar a la claridad, la lucidez y la coherencia con la doctrina estable de la Iglesia.
Información de Public Discourse.
a teología y no la política es lo que dará forma al futuro de la Iglesia
Nathanaiel Peters pidió que se analice la realidad de la Iglesia desde una perspectiva más elevada en los medios de comunicación.
Washington (Miércoles, 01-08-2018, Gaudium Press) El Director Ejecutivo del Morningside Institute, Nathaniel Peters, redactó un artículo para la revista Public Discourse del Witherspoon Institute de Estados Unidos. El Doctor en Teología afirmó que esta ciencia dedicada al estudio de Dios será la que dé forma al futuro de la Iglesia y no la política. Sus palabras buscan que los medios de comunicación hagan un análisis más elevado de la realidad de la Iglesia que trascienda las interpretaciones partidistas.
El académico recordó que años atrás un grupo de profesores y estudiantes de Teología redactaron una carta abierta de protesta para pedir a un diario norteamericano una cobertura de la información católica que no fuera sometida a una narrativa partidista. El intento de los firmantes era desautorizar a un columnista que más adelante transformó sus argumentos en un libro que examina el pontificado del Papa Francisco desde esta perspectiva.
«La Iglesia Católica es una institución humana y todas las instituciones humanas tienen sus políticas», comentó el redactor. «Sin embargo, la Iglesia Católica también es una institución teológica, una cuyos argumentos no simplemente sirven como apoderados para políticos liberales o conservadores». Por este motivo sugirió que el autor del libro y sus colegas deberían ver la Iglesia a través de «un lente más robusto» que tenga en cuenta la Teología.
El autor recordó que numerosas controversias teológicas en la historia de la Iglesia también han tenido una mezcla de política, en la cual reyes y emperadores intentaron promover o presionar a diferentes sectores. «En muchos casos hubiera sido difícil predecir qué ideas hubieran emergido como ortodoxas mirando la política», afirmó Peters, quién afirmó que incluso en algunas oportunidades los proponentes de ideas contrarias a la fe parecieron tener éxito durante décadas. Un caso histórico es el de los iconoclastas, quienes a pesar de haber tenido un éxito temporal en la promoción de sus ideas no pudieron imponerlas definitivamente a la Iglesia.
La fe católica superó esas dificultades porque se llegó a «un mejor entendimiento del Misterio de Cristo, cuya humanidad y divinidad debe ser mantenidas juntas si la Cruz y la Resurrección nos ofrecen la salvación. Rechazamos las creencias de los oponentes porque su lógica hubiera hecho que la Muerte y la Resurrección de Cristo no tuviera sentido. Al final, la lógica de la Encarnación, de la Cruz y la Resurrección determinó el resultado de los debates teológicos, más que la actuación política que los acompañó».
Esta solución teológica de las controversias en la historia de la Iglesia fue respaldada en otros ejemplos, como los debates entre los jansenistas y los jesuitas. Para el autor, el razonamiento teológico tiene una mayor permanencia en la vida de la Iglesia y las controversias temporales ceden eventualmente el lugar a la claridad, la lucidez y la coherencia con la doctrina estable de la Iglesia.
Información de Public Discourse.
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