Londres (Martes, 07-08-2018, Gaudium Press) Con el título de «Out of the Classroom and into the World: How to transform Catholic Education» (Fuera del Salón de Clases y Hacia el Mundo: Cómo Transformar la Educación Católica), un autor convertido a la Iglesia Católica, padre de familia, profesor y educador en casa, Roy Peachey, reflexionó sobre el objetivo primordial de la educación católica, el cual debería ser ayudar a sus estudiantes a ser Santos.
El autor pide que las instituciones educativas católicas estén impregnadas de los valores de la fe y que no se relegue la educación religiosa simplemente a una asignatura de religión. Pero las propuestas del escrito van más allá de una reflexión sobre el testimonio cristiano, sino que incluyen una renovación del modelo educativo para cambiar la manera en que se intenta resolver el problema planteado.
«Las escuelas deberían aprender de los hogares y no al revés», propone Peachey, quién motiva a los padres de familia a reflexionar sobre su responsabilidad en la educación de los hijos, frecuentemente delegada a los educadores en las escuelas sin una suficiente reflexión. Las escuelas deberían reflejar de hecho los valores y convicciones de las familias, quienes deben vivir por su parte un testimonio más profundo.
Por este motivo, el autor plantea un desafío a los lectores: «La verdad es que si nosotros nos hacemos cristianos más fieles, entonces nuestras escuelas van a volverse más esencialmente católicas; y si nuestras escuelas se hacen más esencialmente católicas, entonces nuestros estudiantes van a hacerse más vitalmente humanos».
Entre los consejos prácticos ofrecidos por el autor se encuentran un retorno a la oración, la restricción o limitación del uso de dispositivos electrónicos en el salón de clase y la búsqueda de que los alumnos vuelvan a valorar las obras de literatura clásica en lugar de las ficciones modernas. Todo como parte de un llamamiento a una vocación más alta: «Fuimos creados para conocer, amar y servir a Dios; no para llegar a la universidad y encontrar un trabajo bien remunerado».
Con información de Catholic Herald.
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