viernes, 22 de noviembre de 2024
Gaudium news > Cardenal Saraiva advierte que la mala tristeza no es cristiana

Cardenal Saraiva advierte que la mala tristeza no es cristiana

Lisboa (Viernes, 20-08-2018, Gaudium Press) Durante el lanzamiento de su biografía, el Cardenal José Saraiva Martins afirmó que la mala tristeza no es cristiana. «Si creo en el Evangelio no puedo ser triste, si creo en la resurrección sé que no voy a quedarme en el sepulcro, subiré al cielo. Es la Iglesia de la resurrección, no de la muerte», explicó.

8.jpg

Según el purpurado, «un cristiano no puede dejar de ser alegre, optimista, y tener una concepción positiva de la vida, al final la tristeza no es cristiana y un cristiano tiene motivos para no ser triste».

De acuerdo con el director general de la PAULUS Editora, el Cardenal portugués siempre estuvo presente en la Iglesia y sociedad portuguesas, incluso viviendo durante mucho tiempo en Roma. Por causa de eso, el presidente de la Cámara Municipal, Álvaro Amaro, anunció que será atribuida la Medalla de Honra del municipio al purpurado otorgándole el título de ciudadano honorario de la Guarda.

El Cardenal José Saraiva Martins nació el día 06 de enero de 1932 en Gagos de Jarmelo (Guarda), y desde niño iba todos los domingos a Misa. Reside en Roma desde los 17 años de edad, donde se doctoró en Teología por la Universidad de Santo Tomás, y en Filosofía por la Universidad Pontificia Urbaniana, siendo ordenado sacerdote el día 16 de marzo de 1957, como miembro de la Congregación de los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María (Claretianos).

Entre los años 1977 y 1983, Mons. José Saraiva Martins fue rector de la Universidad Urbaniana, cargo que volvería a desempeñar entre 1986 y 1988. El 26 de mayo de 1988 el Cardenal portugués fue nombrado Arzobispo titular y secretario de la Congregación para la Educación Católica, por el Papa San Juan Pablo II.

Diez años después fue nombrado prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el día 30 de mayo de 1998 y fue creado Cardenal en el Consistorio del 21 de febrero de 2001, con el título de Cardenal-diácono de Nostra Signora del Sacro Cuore.

El purpurado renunció el día 09 de julio de 2008, y, al año siguiente, el Papa Benedicto XVI lo nombró Cardenal-Obispo de la Iglesia Católica, con el título de Cardenal-Obispo de Palestrina, el día 24 de febrero de 2009. (EPC)

 

 

Deje su Comentario

Noticias Relacionadas