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Madrid (Miércoles, 05-09-2018, Gaudium Press) El caso de la denuncia de vejación a los sentimientos religiosos instaurada en contra del actor español Willy Toledo por parte de la Asociación Española de Abogados Cristianos ha tomado un giro inesperado cuando un juzgado de la ciudad de Madrid emitió una orden de detención contra el acusado. El motivo es la ausencia del actor en dos citaciones judiciales.
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| El actor se enuentra obligado a comparecer antre la solicitud de los jueces y su detención se origina en su desacato a la autoridad judicial. |
El Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid ordenó que el actor sea detenido y puesto a disposición de la justicia el próximo 13 de septiembre. De esta manera se asegura que el acusado responda sobre los comentarios ofensivos difundidos a través de redes sociales en contra de los sentimientos religiosos de los católicos. A este proceso se sumará la posible existencia de un delito de odio por las declaraciones del artista durante el programa Al Rojo Vivo de La Sexta, en debate con la presidente de la Asociación Española de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos. Toledo justificó al aire el fusilamiento de personas a causa de su fe católica durante la Guerra Civil Española.
La Asociación aclaró que la acción legal no constituye una persecución en contra del actor ni se origina en sus comentarios, sino que en realidad ya se le había eximido de pagar una multa por no declarar en una primera oportunidad. «Todos somos iguales ante la Ley», recordó Castellanos al explicar el origen de la detención a los medios de comunicación. Willy Toledo «tiene la obligación de acudir al Juzgado si le cita un juez, aunque él crea que tiene privilegios especiales por su posición social».
La declaración del actor es un paso importante dentro del proceso judicial ya que, después de escuchar al acusado, el juez podrá decidir sobre si continúa la instrucción con pruebas solicitadas a la fiscalía y a los demandantes o si procede a abrir un juicio oral. El actor debe responder por una serie de afirmaciones que justamente se produjeron en el marco de un juicio oral contra tres mujeres que realizaron una procesión en 2014 en la ciudad de Sevilla , organizada como parodia sacrílega de las celebraciones católicas.
Las declaraciones del actor se destacaron por su lenguaje soez en contra de Dios y la Santísima Virgen. En repetidas oportunidades, el actor descalificó las decisiones de las autoridades judiciales y afirmó a los medios de comunicación que «si quieren verme (los jueces), tendrán que venir a detenerme».
Con información de InfoCatólica, La Vanguardia y Abogados Cristianos.
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