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Phoenix (Miércoles, 19-09-2018, Gaudium Press) Cientos de católicos en la Diócesis de Phoenix, Estados Unidos, se unieron a la celebración de una Hora Santa en la Catedral de los Santos Simón y Judas en reparación por los escándalos de abusos registrados en la Iglesia Católica del país. El Rector de la Catedral, P. John Lankeit, presidió la celebración y predicó a los presentes, animándolos a una vida de conversión y oración como aporte, en medio de las súplicas a Dios por la purificación de la Iglesia y la reparación de los daños.
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| El Rector de la Catedral aconsejó alejarse del pecado, buscar la santidad y suplicar a Dios la purificación de la Iglesia. Foto. The Catholic Sun. |
El predicador hizo un llamado a cambiar la forma en la cual se interpreta el clamor de las víctimas de abuso, recordando el testimonio de San Juan Bautista, quien dio la vida como parte de su ministerio profético. «Su persecutor le pidió no que negara a Cristo, sino simplemente que guardara silencio sobre la verdad», declaró el Rector de la Catedral. «Hemos tenido suficiente de guardar silencio sobre la verdad».
El sacerdote recordó que las que las víctimas son parte del cuerpo de Cristo y pidió a los fieles buscar en Dios las soluciones a los problemas que no están en nuestras manos. «Es importante comprender que no tenemos poder en contra de este mal, pero no estamos indefensos», propuso el P. Lankeit. «No está en nuestro poder arreglarlo. La solución de lo que está sucediendo en la Iglesia es someternos al Señor».
El testimonio de las personas que han cargado «una cruz horrorosa» por los sufrimientos causados por miembros de la Iglesia debe motivar a los fieles a ser más fuertes. «Les debemos a ellos perseguir la santidad», indicó el Rector, al tiempo que explicó que la raíz profunda de los escándalos es «la desobediencia a la enseñanza de la Iglesia y un espíritu de disentimiento». Por este motivo invitó a los presentes a retirar de su corazón las infidelidades a las verdades de la fe en temas concretos y comenzar la purificación de la Iglesia con el arrepentimiento personal.
El P. Lankeit hizo énfasis en la importancia de promover la fidelidad a la fe en las pequeñas cosas y recordó que el camino de Judas, el apóstol que traicionó a Jesús, comenzó con actos pequeños que lo llevaron a «la traición más cruel e injusta de la historia humana». Los escándalos recientes demuestran la actualidad de esta advertencia y los involucrados en abusos y encubrimientos constituyen para el Rector «los Judas modernos en el sacerdocio y el episcopado de hoy».
Con información de The Catholic Sun.
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