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Lansing (Viernes, 28-09-2018, Gaudium Press) Más de 14 mil católicos participaron de la Asamblea Eucarística «Made for Happiness» (Hechos para la Felicidad), llevada a cabo el pasado 22 de septiembre en el campus de la Michigan State University en lansing, Estados Unidos. Más de cuatro mil participantes se unieron a una procesión Eucarística de 3.6 millas y más de una hora de duración desde la Catedral de Santa María hasta el centro de eventos de la universidad. La Asamblea fue descrita como la reunión más grande de fieles católicos en los más de 80 años de historia de la Diócesis de Lansing.
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| La procesión recorrió las calles de la ciudad en la mayor manifestación pública de fe en 80 años. Foto: Diócesis de Lansing. |
«Esperamos que esto encienda a las personas para salir y hacer ese discipulado, para hacer esa evangelización, para vivir su fe en la vida diaria, en su entorno laboral, en su entorno social», comentó a CNA Michael Diebold, Portavoz de la Diócesis de Lansing. Los organizadores esperan que los miles de participantes «puedan salir en su vida cotidiana y difundir esa noción de estar hechos para la felicidad, y atraer personas a la Iglesia».
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| Foto: Diócesis de Lansing |
Para facilitar la participación de los fieles locales – se calcula que casi un cuarto del total de los feligreses se unió al evento – el Obispo de Lansing, Mons. Earl Boyea, pidió la cancelación de las Eucaristías y otros servicios parroquiales del día sábado. Durante la procesión se habilitó la presencia de una docena de sacerdotes que administró el Sacramento de la Penitencia en diversos puntos del trayecto de la procesión.
Al término de la procesión, Mons. Boyea presidió un tiempo de Adoración Eucarística en el cual pidió a los fieles a orar por las víctimas de abuso en Estados Unidos y por la reparación de los pecados de los miembros de la Iglesia que cometieron actos gravemente inmorales y de quienes los hayan encubierto. Al término de la Asamblea, el Obispo presidió una Eucaristá solemne en la cual pidió a los creyentes buscar la felicidad auténtica en el Cielo y ayudar a otros a encontrar a Dios, fuente de la felicidad eterna.
Con información de Diócesis de Lansing y CNA.
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